Evîn Cuma, directora de la Asociación de Derechos Humanos de Cizîre, habló con ANF sobre las últimas declaraciones del presidente turco Erdoğan. Dijo que están " preparando un proyecto que garantice el retorno de un millón de sirios".

Señalando que las declaraciones de Erdoğan son contrarias a las leyes internacionales de derechos humanos, Evîn Cuma declaró: "Según las leyes internacionales de derechos humanos, cuando se envía a los refugiados a sus propios países, hay que enviarlos a sus ciudades y hogares. La guerra en Siria no ha terminado. Va en contra del derecho internacional enviar a la zona de guerra a personas que ya han escapado de ella". Erdoğan, en cambio, quiere enviar a estas personas a las zonas que ocupó en Siria. Estas tierras y los lugares donde se ubicarán no pertenecen a estas personas; pertenecen a la gente de la región que Erdoğan obligó a emigrar. Se trae a alguien y se le pone en el lugar de otros. Esto no es favorecer el retorno natural de los refugiados. Es un crimen".

Quieren que la gente se pelee entre sí

Afirmando que el gobierno del AKP-MHP está tratando de enviar a los refugiados a las zonas ocupadas de Siria mediante la presión, Evîn Cuma dijo: "Leemos en los medios de comunicación sobre la presión que sufren los sirios en Turquía. De hecho, Turquía está tratando de enviar por la fuerza a las personas que quiere devolver a Siria. Se están desarrollando ataques racistas contra los sirios, y son alentados por el propio Estado. Por lo tanto, el proyecto de Erdoğan es ilegal y poco ético. Si traes a un pueblo o una comunidad y lo colocas en el lugar de otra comunidad, crearás enfrentamientos entre los pueblos. Porque lo que traes no es el pueblo de esta región. Los verdaderos propietarios de las zonas ocupadas son las personas que han huido de esa región debido a la ocupación, la mayoría de las cuales son kurdos. De este modo, pretenden crear un conflicto entre kurdos y árabes".

Cambio de demografía

Evîn Cuma afirmó que uno de los principales propósitos de llevar a los refugiados sirios a Turquía y reubicarlos en zonas como Afrin, Serêkaniyê y Girê Spi, ocupadas por el Estado turco, es promover un cambio demográfico.

"El Cinturón Árabe ya fue implementado en estas regiones durante el periodo del régimen. Muchas tierras pertenecientes a los kurdos, Raqqa, Deir ez-Zor, fueron entregadas a los árabes traídos de otras regiones, y con esta práctica se produjo un cambio demográfico.

El Estado turco ya ha llevado a cabo un cambio demográfico en las regiones que ocupó en Siria, especialmente en Afrin. Ahora habla de traer un millón de personas. Traerlos y colocarlos en regiones como Afrin, Girê Spî, Serêkaniyê y Ezaz reforzará aún más este cambio demográfico", dijo Cuma.

Turquía quiere que los recién llegados se instalen permanentemente en las zonas ocupadas

Afirmando que el Estado turco está construyendo casas en las zonas ocupadas en Siria, especialmente en Afrin, Evîn Cuma señaló: "En otras palabras, ya no trae a los colonos que trae de fuera y los coloca en campamentos de tiendas de campaña. Los campamentos de tiendas de campaña demuestran que los que se instalan aquí volverán algún día a sus propias regiones, que son temporales allí.

Pero el Estado turco está construyendo casas con la ayuda y el dinero de tantas supuestas organizaciones de ayuda, especialmente de Qatar y Kuwait. Turquía quiere asentar a la gente que llevará allí de forma permanente. Con ello, quiere cambiar la demografía y asegurarse de que la gente que vive allí se compromete al cien por cien con ella".

Conectar la región ocupada con Turquía

Cuma continuó: "El objetivo de Turquía no es sólo cambiar la demografía de las zonas que ocupa; quiere conectar estas zonas con Turquía. La cultura, la lengua, la economía y la institucionalización en estas zonas han cambiado. Por ejemplo, aunque hay ciudades sirias, está prohibido usar dinero sirio allí. Se utiliza la moneda turca. Siria ha cortado su Internet y se utiliza el de Turquía. El agua y la electricidad se suministran a estas regiones desde Turquía. Turquía está construyendo un muro en Afrin y lo está separando de las regiones sirias. Una vez más, los habitantes de las zonas ocupadas por Turquía eran kurdos, árabes, asirios, turcomanos y asirios, y enseñaban en su propia lengua. Ahora, el turco y el árabe son la lengua de enseñanza, pero el árabe pasa a un segundo plano en favor del turco. Colgaron banderas turcas por todas partes".