La Academia Mártir Berçem difunde los valores de la Nación Democrática

La Academia Mártir Berçem funciona a pleno rendimiento y lleva ya 43 ciclos formativos organizados e impartidos.

La Academia Mártir Berçem, en la ciudad de Dirbêsiyê, se ha convertido en un centro de formación de la región para aprender y difundir los valores y principios de la nación democrática y de la co-existencia.

La Academia por una Sociedad Democrática Mártir Berçem abrió sus puertas en 2013 en Dirbêsiyê, ciudad situada en la provincia de Hesekê.

Cada mes se organizan ciclos formativos y programas educativos. Hasta este momento se han organizado 43 ciclos formativos con éxito.

Miembros de las comunas y de las administraciones autónomas han asistido a las formaciones.

El último ciclo formativo fue nombrado en homenaje al Mártir Yilmaz y todavía no ha concluido.

En general, los ciclos formativos tienen una duración de 25 días y cuentan con la participación de 25 personas.

Las materias que incluyen estos ciclos incluyen ciencia, dicción, historia, geografía kurda, conciencia patriótica, la Revolución de Rojava, la nación democrática, auto-defensa, compañerismo y jineolojy, todas ellas se imparten siguiendo el método de auto-crítica.

El ciclo también incluye seminarios y documentales así como sesiones individuales.

Los encargados de la academia recuerdan como al principio la participación en los programas educativos era baja, debido a la represión y a los ataques de las fuerzas del régimen. Ahora, en cambio, la participación crece constantemente, especialmente tras el desrrollo de la Revolución de Rojava.

“Queremos superar la mentalidad del sistema dominante impuesto, también a través de las formaciones que se dan en la academia”, ha informado Neha Ehmê, una de las directoras de la academia, en declaraciones a ANHA.

La educación bajo el régimen estaba orientada a satisfacer los intereses del estado según Ehmê, que también ha explicado que precisamente es eso lo que el modelo de la Autonomía Democrática ha cambiado.

Emar al-Ewashî, que participó en un ciclo formativo, ha dicho que el curso ofrece la posibilidad de entender la importancia de la vida en común de las personas.

Al-Ewashî ha dicho que: “La vida comunitaria es posible entre personas con distintas creencias y de distintas razas”.