La gente de Afrin se vio obligada a mudarse a Shehba debido a la invasión del estado turco y sus bandas aliadas que atacaban la ciudad. Las familias de Afrin se establecieron en carpas y casas medio demolidas en ataques de mercenarios anteriores, esperando el día en que su ciudad vuelva a ser libre. Miles de personas se han instalado en campamentos, de tiendas de campaña, en Shehba.

Con la llegada del invierno, la gente de Afrin está pasando por el momento más difícil en su estado migratorio. Las tiendas de campaña y las casas semi destruidas donde se asentaron, no ofrecen protección contra el viento o la lluvia. La gente continúa allí en una muestra de gran voluntad, y están preparando sus tiendas para el invierno lo mejor que puedan.

Heysem Xelo se instaló en una casa en ruinas en el pueblo de Til Qerah y está cubriendo las ventanas con lona para detener la lluvia. Xelo dijo que esperarán el día en que puedan regresar a Afrin y nunca se inclinarán ante los invasores, a pesar de las malas condiciones.

Narîman Shêxmûs dijo que el techo y las puertas de la casa donde se instaló están dañadas y la lluvia entra fácilmente a la casa. Añadió que esto no afecta su fe en que volverán a Afrin. Cemîla Mecîd Ebdo dijo que han tapado todos los agujeros de la casa con lona y barro, y agregó que nunca renunciarán a su resistencia, sin importar lo que ocurra.

La administración Popular de Shehba distribuyó cemento a las personas que se establecieron en los campamentos de Berxwedan, Serdem y Afrin y en casas en ruinas en pueblos cercanos, para que realicen reparaciones.