En los últimos días, los restos de los mártires enterrados en el cementerio cerca del Hospital Avrin en Afrin fueron desenterrados por el Estado turco. Los medios de comunicación pro-turcos fabricaron informes falsos diciendo que se trataba en realidad una fosa común donde habían sido arrojados los civiles asesinados por las YPG y las YPJ.
Las familias de los mártires de las YPG y las YPJ enterrados en el cementerio han reaccionado ante estas declaraciones y la profanación de las tumbas llevada a cabo por el Estado turco. En un informativo especial de Medya Haber, las familias explicaron que tanto los combatientes como los civiles tuvieron ser enterrados en este cementerio.
Avdoyê Tevfîk dijo que el cuerpo de su padre, el mártir Tevfik asesinado por el Estado turco y sus mercenarios, se encuentra entre los desenterrados. Tevfîk dijo que su padre fue tratado en el Hospital Avrin después de ser herido, pero que perdió la vida allí y fue enterrado en el cementerio cercano al hospital. “Mi padre fue herido en el ataque a Alemdar el 13 de febrero de 2018. Estaba ingresado en el hospital Avrin. Cayó mártir el 14 de marzo. Había tres parcelas de mártires en Afrin. No pudimos enterrar a nuestros mártires en otras. Por ello, los enterramos al lado del Hospital Avrin. Enterramos a 32 mártires junto a mi padre ese mismo día”.
La madre de la mártir Amara, que perdió la vida en los ataques del Estado turco, dijo que la ciudad fue bombardeada por 72 aviones tras el inicio de los ataques de invasión. Dijo que el presidente turco Tayyip Erdoğan y sus mercenarios apuntaron a todos los que vivían en Afrin y describió los acontecimientos de la siguiente manera: “Reunimos a todos los que perdieron la vida en la masacre de Mahmude y en otras masacres. Había civiles entre ellos. No quedaba ningún cementerio en la ciudad para enterrar a nuestros mártires. Tuvimos que enterrar a los combatientes y a los civiles detrás del Hospital Avrin. Estas personas cayeron mártires protegiendo a su pueblo y sus tierras”.
La mujer agregó: “El mundo entero observó en silencio mientras los kurdos eran asesinados por el Estado turco. Erdoğan y sus mercenarios mataron a jóvenes, mujeres, niños y ancianos kurdos. Ahora atacan a nuestros mártires. No aceptamos esta brutalidad. El pueblo kurdo también tiene derechos. Los Estados del mundo deben pedir cuentas a Erdogan por su brutalidad. Protegeremos a nuestros mártires y a nuestros dirigentes hasta el final. Erdoğan no es diferente del ISIS. Mientras vivamos, seguiremos los pasos de nuestros mártires y nos opondremos a Erdoğan”.