Citando fuentes del pueblo de Xelil, en el distrito Shiye de Afrin, la Agencia de Noticias Hawar (ANHA) informó que el ejército de invasión turco y los mercenarios yihadistas aliados han secuestrado a muchos residentes de la localidad y han pedido un rescate a sus familias para liberarlos.

Los invasores pidieron 3.000 dólares a la familia del civil secuestrado Umer Heyder Reşîd, 1.500 dólares a los familiares de Mihemed Mihemed Cocan, 1.000 dólares a los familiares de Hesen Menan Calo y Arif Mehmûd Reşîd, y 6.000 dólares a la familia de Mustefa Îbiş Cafer.

Fuentes locales informaron de que los mercenarios también han saqueado las propiedades y pertenencias de los civiles. Mientras que Nacî Elî y Înce Mustef han sido secuestrados, Elî Sefer Edhem ha sido víctima del robo de su coche por parte de los terroristas.

En el pueblo de Der Sewan, en el distrito de Shera, los terroristas han secuestrado a los civiles Şêxo Mihemed Kerez, Rênas Mihemed Kerez, Şiyar Mihemed Kerez, Fûad Nasan Berazî, Şêxmûs Mihemed Xelîl, Mihemed Horîk Osman, Hesen Ehmed Camo, Roşîn Hebeş Hisên, Menand Enwer Abdullah, Menand Ehmed Axa y Hesen Tirkî Eleq.

En la localidad de Meydan Ekbes, en el distrito de Rajo, los civiles Emîne Hisên, Emîne Daûd Ekaş, Emîne Umer y su marido, Faruk Hemîd Xalid, Reşîd Umer Seydo, Şikrî Betal Betal y Mustefa Hesen Dodîk han sido secuestrados y se desconoce su paradero. Los mercenarios han pedido rescate a las familias de los civiles secuestrados para liberarlos.

El saqueo de las casas de los civiles y el asentamiento de las familias de las bandas en la región han obligado a varias familias a buscar refugio en los hogares de sus parientes.

Los informes sugieren que el centro de salud situado en la carretera del Rajo se ha convertido en un almacén de municiones.

Fuentes locales también informan de que el cadáver de un joven ha sido encontrado en los bosques situados entre el centro de la ciudad de Afrin y la aldea de Basute. Se desconoce la identidad del joven asesinado, así como la causa de su muerte.

Por otra parte, las fuerzas de ocupación no permiten que la gente pode sus aceitunas en las regiones de Zerafke y Mabeta. Los terroristas están pidiendo un rescate a cambio de los olivares y confiscando las propiedades de la población local. Los que se oponen a estas prácticas son castigados.

Las bandas también han prohibido la venta de pan para la gente del pueblo de Ciweq, para que sólo una persona venda el pan para todo el pueblo.

Por otro lado, los terroristas han arrancado 20 olivos pertenecientes a un civil llamado Abdullrehman Osman.