La Administración Autónoma del Norte y el Este de Siria ha condenado el bombardeo de Kobanê por parte del ejército turco y sus fuerzas proxy y ha pedido a la coalición internacional contra el ISIS y a Rusia que actúen. "Con estos ataques, la ocupación turca está enviando un mensaje claro: la continuación de la guerra de aniquilación contra nuestro pueblo", dijo la Administración Autónoma en un comunicado.
El sábado, doce personas resultaron heridas, algunas de gravedad, entre ellas varios niños, en los ataques con drones y artillería de Turquía y sus aliados yihadistas contra pueblos de Kobanê y sus alrededores. Un civil murió y Abdo, de cuatro años, se encuentra en estado crítico después de que le amputaran una pierna. El bombardeo de la región continuó el domingo.
"Los continuos ataques de Turquía contra nuestros territorios son al mismo tiempo una expresión de la actitud de la coalición internacional dirigida por Estados Unidos y Rusia hacia nuestro pueblo. A pesar de los acuerdos de alto el fuego y de desescalada acordados con el Estado turco, ni la coalición ni Rusia responden adecuadamente ante estos ataques", señaló la Administración Autónoma.
La escalada turca contra el norte de Siria exige que Washington y Moscú adopten una posición clara. "De lo contrario, tienen la misma responsabilidad por estas acciones. Hacemos un llamamiento a la comunidad internacional y a todos los actores principales para que detengan inmediatamente la agresión de Turquía, que está desestabilizando la región y conduciendo al resurgimiento del ISIS."
La Administración autonómica ofreció sus condolencias a los familiares del civil asesinado Ibrahim Şerif y deseó una pronta recuperación a los heridos.