Mercenarios controlados por el estado turco invasor continúan cometiendo crímenes contra la humanidad en Afrin.

Según la información recibida de una fuente local en el distrito de Rajo, los grupos que se presentaron como "policías militares" secuestraron a tres civiles en la aldea de Bedîna el 30 de noviembre, siguiendo instrucciones de la inteligencia turca.

La familia de Xelil Mihemed Sheba (60), uno de los civiles secuestrados, tuvo que pagar 338 mil liras sirias a cambio de su liberación. El destino de los otros dos civiles secuestrados, Rifet Hisên Mihemed (43) y Omer Beyrem Elo (65), aún no está claro.

Los grupos afiliados al estado turco recibieron un rescate de 1.500 liras turcas por persona de las familias por la liberación de los civiles Ahmed Arif İbiş y Hesen Arif Osa, a quienes habían secuestrado previamente.