La Iglesia Armenia Selîb, que fue convertida en base militar por el ISIS, ha sido restaurada y reabierta como lugar de culto por la población armenia de la ciudad 3 años después de su liberación.
El ISIS había quemado las imágenes de cristo y otros santos en la iglesia tras la invasión. También retiraron la cruz que estaba en lo alto de la iglesia. Una parte de la iglesia fue usada como prisión, y el resto para entrenamiento con armas y reuniones. Durante la invasión, los armenios no podían realizar sus ritos religiosos en la ciudad, así que la población cristiana se vio obligada a realizarlos clandestinamente.
Sin embargo, tras la liberación, los armenios comenzaron los trabajos de restauración, que acaban de ser terminados. Una nueva cruz ha sido colocada de nuevo en el mismo sitio donde estaba la anterior.
El vecino armenio de Girê Spî, Losyan Matosyan ha dicho que han reparado la iglesia con el apoyo de la población armenia de la ciudad y que todavía quedan algunos elementos del edificio por restaurar. Matosyan cree que fueron perseguidos por su religión durante la ocupación del ISIS.
Matosyan manifiesta haber encontrado agujas y pastillas dentro de la iglesia y que los mercenarios del ISIS usaron como lugar de entrenamiento lo que antes era un lugar dedicado a la educación en su lengua materna por la congregación cristiana.
Matosyan ha concluido afirmando que han vuelto a levantar una cruz en lo alto del edificio ya que ahora la comunidad es libre de practicar su religión como les plazca.