Fuentes locales dicen que dos hermanos llamados Juma Nedim y Bekri Nedim de Alepo fueron detenidos por bandas aliadas de Ankara en la aldea de Tiltene en Al-Bab y fueron torturados violentamente.

Las bandas centradas en Jarablus ejecutaron a los hermanos Nedim hace dos días.

En la línea de invasión del estado turco desde Jarablus a Afrin, la tortura y las ejecuciones se han convertido en hechos cotidianos.

Afrin ha estado bajo la ocupación del estado turco desde el 18 de marzo de 2018. Desde los ataques de invasión, los crímenes de guerra se han cometido sistemáticamente en la región. Además de crímenes severos como la confiscación de bienes locales, el secuestro de civiles para obtener rescates, torturas y ejecuciones, el estado turco también está cambiando la composición demográfica de la región.

Los crímenes de guerra y la limpieza étnica también han sido mencionados en informes de organizaciones internacionales. La Comisión de Investigación Independiente de las Naciones Unidas para Siria señaló en un informe en febrero que se cometían crímenes de guerra en Afrin. El informe destacó que las detenciones arbitrarias, los secuestros, la trata de personas, la tortura, el hostigamiento, el soborno y otras prácticas eran frecuentes.