Desde el 8 de enero, civiles del noreste de Siria han estado realizando una vigilia en la presa de Tishrin para proteger su territorio junto a las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) y las Unidades de Defensa de las Mujeres (YPJ) que se enfrentan a los ataques del ejército turco y mercenarios aliados llamados Ejército Nacional Sirio (SNA).

El martes 18 de febrero, un grupo de personas de Qamishlo, Tirbespiyê, Amûdê y Til Hemis se hicieron cargo de la vigilia.

Mientras la vigilia continúa en su 43° día, la gente mantiene su determinación a pesar de los ataques mortales dirigidos repetidamente contra ellos, que han cobrado la vida de docenas de personas, incluidos tres periodistas.