TEV-DEM considera a la ONU y a la comunidad internacional corresponsables de los crímenes en Afrin
El TEV-DEM dice en un comunicado que las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales son responsables de los crímenes cometidos en Afrin.
El TEV-DEM dice en un comunicado que las Naciones Unidas y las organizaciones internacionales son responsables de los crímenes cometidos en Afrin.
El Movimiento de la Sociedad Democrática (TEV-DEM) ha dicho en un comunicado que las violaciones de derechos y los crímenes cometidos por el Estado turco invasor y sus mercenarios en Afrin aumentan cada día.
“La ocupación turca y sus mercenarios son acusados de saquear, destruir lugares históricos, demoler tumbas y lugares sagrados, profanar las tumbas de los mártires y tratar de cambiar la demografía de la región. Todo ello viola el derecho internacional. En Afrin se está aplicando una política de terror organizada y sistemática ante el mundo entero. El silencio de la comunidad internacional justifica los crímenes del Estado turco. Los crecientes ataques de la ocupación turca a los valores humanitarios y sociales son una prueba de ello. Turquía profanó las tumbas de los mártires de Afrin. Los restos en este cementerio pertenecen a los combatientes que cayeron como mártires en los bombardeos de los invasores contra Afrin [en 2018]. El Estado turco escribió un escenario alejado de los valores sociales y, después de 3 años, afirmó que se trataba en realidad de una fosa común. Su objetivo es difamar a los miembros de las YPG y las YPJ que cayeron mártires en la Resistencia de la Era”.
La declaración del TEV-DEM añade: “El Consejo de Familiares de los Mártires de Afrin y los documentos de las YPG revelaron una vez más la hipocresía de la ocupación fascista turca. El pueblo de Afrin enterró a sus mártires con sus propias manos en esta preciosa tierra. Este es el mayor factor que desmiente las pretensiones del Estado turco. La política de terror sistemática y organizada implementada por el Estado turco va en contra de todos los valores y leyes. Vemos a las Naciones Unidas y a las organizaciones internacionales como responsables de estos crímenes. Porque estas instituciones internacionales permanecieron en silencio durante la destrucción de los lugares sagrados de otros pueblos, especialmente del pueblo kurdo”.