Inauguran una biblioteca kurda en Sur, Amed

La biblioteca ofrece una variedad de libros en kurdo, especialmente dirigidos a los niños y jóvenes adultos

La biblioteca de libros kurdos es parte de la campaña lanzada hace unos días en la ciudad de Amed por la Plataforma de Lenguas Kurdas, conformada por el Partido Democrático de los Pueblos (HDP), el Partido de las Regiones Democráticas (DBP), el Partido de la Libertad y el Socialismo (OSP), el Partido Democrático de Kurdistán-Bakur (KDP-B), el Partido Democrático de Kurdistán-Turquía (KDP-T), Partido Socialista de Kurdistán (PSK), Partido de la Libertad del Kurdistán (PAK), el Partido Humano por la Libertad y Movimiento Azadi.

La Plataforma tiene como objetivo que el kurdo sea reconocido como idioma oficial. La biblioteca en el barrio Ziya Gökalp se ha abierto basado en el espíritu de los objetivos de la Plataforma.

Los libros en la biblioteca están en los dialectos del Kurmancî y Kirmanckî.

Ilyas Karagöz dijo que hace 7 años se inaguró un espacio de trabajo de antigüedades en Sur, la cuna de la historia. “Desde que era niño, dijo, me encantaba la historia y el arte. Después de encontrar este lugar, abrí el mercado de antigüedades y en el piso de arriba empecé a preparar una galería de arte. En la galería de arte, se exhiben esculturas, pinturas y trabajos de artesanía. Hace unos meses, decidimos añadir la biblioteca kurda a nuestra galería de arte ".

Una biblioteca contra la asimilación

Karagöz, quien empezó a trabajar en la biblioteca hace un mes, dijo que este ya había terminado y que los jóvenes habían mostrado u gran interés en la biblioteca.

Karagöz enfatizó que la biblioteca ofrece una variedad de libros para niños, novelas, poemas, historias, diccionarios y libros de aventuras.

Al recordar cómo los niños y adolescentes de Kurdistán y Turquía se enfrentan una enorme política de asimilación, Karagöz dijo: “El futuro del país son nuestros niños y jóvenes. Para eso, la biblioteca ofrece especialmente libros para ellos. La lengua kurda es una responsabilidad para cada kurdo. Y es porque sentí esta responsabilidad que decidí abrir una biblioteca en Amed".

Cuma Karakoç pasa cuatro horas al día leyendo libros en la biblioteca. “Cuando estaba en la aldea, me enseñaron turco, y hasta más tarde no aprendí kurdo. Estábamos sometidos a una política de asimilación. Para poder contrarrestarla tenemos que aprender nuestra lengua materna primero. Los jóvenes deberían aprender a leer y escribir en kurdo ”.