De los civiles atacados por los militares turcos contra Afrin en el norte de Siria, 32 personas muertas y 49 heridas, que han sido llevadas a hospitales en Afrin, es el saldo de 7 días de la masacre turca.
El miembro del Comité de Salud de Afrin Canti, Ciwan Mihemed, declaró que los ataques turcos contra civiles en Afrin causaron la muerte de 6 niños de Idlib, 1 de Alepo y 1 de Rajo.
Según Mihemed, como resultado de los ataques turcos, 1 mujer murió en la aldea de Cilber, 1 en Til Silor, 2 en Cindires y 2 en Mabata.
2 hombres de Idlib murieron en Cilber, 5 hombres en Cindires, 1 en Kefer Hamra, 1 en Edama, 1 en Celeme, 1 en Mabata, 1 en Rajo y 1 en Afrin.
De los 49 civiles heridos que han sido hospitalizados, 13 son niños, 9 son mujeres y 27 son hombres.
Un joven armenio figura entre los asesinados por los ataques turcos contra Afrin. El joven, Roşêr Konîs, es de una de las familias armenias que viven en Afrin. Su madre Semsa Konis y su hermana Hanife Koniş también sufrieron heridas en el ataque turco.
Un conocido, Hartiyon Kîvork, declaró que los abuelos de la familia Konis habían huido del Genocidio Armenio y se habían establecido en Afrin hace cien años. Kîvork dijo; "Sin embargo, fueron blanco de bombardeos aéreos del ejército turco invasor aquí hoy".
