En el caso de la política kurda Aysel Tuğluk, que padece demencia de Alzheimer crónica y progresiva en prisión, el Instituto de Medicina Forense realizó un nuevo examen y decidió que Tuğluk está en condiciones de ser detenida.
Los abogados de Aysel Tuğluk denunciaron que el informe del Instituto de Medicina Forense era sesgado y poco científico, advirtiendo que “la condición de Tuğluk es crítica”. Recordaron que, según un informe exhaustivo de la Junta de Medicina Forense de la Facultad de Medicina de Kocaeli, la ejecución de la sentencia de Tuğluk debería posponerse porque su enfermedad ha alcanzado un umbral crítico, lo que le impide vivir sola en las condiciones de prisión.
Los abogados señalaron que Tuğluk no es liberada a pesar de que el informe indica que no podía recibir tratamiento en las condiciones de prisión.
El informe sesgado decía que Tuğluk tenía total responsabilidad penal por su participación en los asuntos en disputa. Sin embargo, la cuestión de la salud y el estado cognitivo de Tuğluk en el momento de los hechos es irrelevante, subrayaron los abogados.
La cuestión que debe evaluar el ATK es si Tuğluk podría hacer una defensa debido a su estado de salud actual, agregaron.
“Dado que el informe se centró solo en los relatos y las denuncias en la acusación y no incluye un solo documento médico sobre el estado de salud de Tuğluk, así como los registros de salud de la prisión, los testimonios de los funcionarios médicos y administrativos que brindan atención en la prisión y de los demás detenidos, es unilateral y está lejos de ser científica y objetiva.
Sin embargo, un individuo debe estar sano para la ejecución de una sentencia. Nos gustaría enfatizar que el informe no hace una evaluación sobre su estado de salud actual. Se comprende fácilmente a partir de las observaciones y evaluaciones de su salud en el informe de fecha 4 de febrero de 2022, preparado por ATK, que no es posible que la Sra. Tuğluk se defienda ante los tribunales.
Considerando los informes emitidos por la ATK sobre reclusos enfermos, y la cantidad de reclusos fallecidos recientemente en las cárceles, el estado de salud actual de nuestra cliente imposibilita un tratamiento en condiciones acordes con la dignidad humana.
Nos gustaría señalar que, debido al crítico estado de salud de Tuğluk, hemos emprendido acciones legales para su tratamiento y para la preparación de un informe científico al transferirla al Departamento de Neurología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Estambul. Además, hemos iniciado un proceso legal para realizar investigaciones penales y administrativas contra los médicos que elaboraron el informe en cuestión, lo cual está lejos de la objetividad científica y la ética médica y es contrario a las decisiones provisionales de la corte”.