En un informe sobre el ataque de la invasión turca contra Afrin, Amnistía Internacional dijo que decenas de civiles murieron a consecuencia del bombardeo turco de la región.

Amnistía dijo el miércoles que entrevistó a 15 personas que viven en Afrin y Azaz, o que fueron desplazadas recientemente de ellas.

De acuerdo con el video de Amnistía, el análisis había corroborado sus relatos de haber caído bajo fuego indiscriminado.

Sido, un residente de la aldea de Maabatli, describió cómo un proyectil alcanzó la casa de su vecino el 25 de enero, matando a cinco de las seis personas que se encontraban dentro.

"El ataque destruyó la casa por completo, matando al padre, a la madre y a tres niños menores de 15 años. Un cuarto hijo (...) sobrevivió, pero se encuentra en estado crítico", declaro el residente. "No hay cuarteles militares al lado de la casa ... La primera línea más cercana está a 41 km de distancia en la frontera".

Además, varios misiles y granadas de mortero han caído en áreas residenciales dentro de Turquía, matando al menos a siete civiles.