El presidente turco Recep Tayyip Erdogan no ha esperado mucho tiempo tras ganar las elecciones presidenciales del 28 de mayo para revelar su intención de acelerar la aplicación de sus planes que buscan cambiar la composición demográfica de las regiones del norte de Siria. Estos planes están a punto de convertirse en realidad, a expensas de los refugiados sirios que él literalmente ha vendido en cooperación con Qatar, país que proporciona la financiación para la aplicación de estos planes.
El Fondo de Qatar para el Desarrollo y la Presidencia turca de Gestión de Desastres y Emergencias, pusieron la primera piedra de un proyecto para establecer lo que denominan una “ciudad integrada en el norte de Siria”. Esto ocurrió en presencia de Khalifa bin Jassim al-Kuwari, director general del Fondo, y de Suleiman Soylu, (ex) ministro turco del Interior, con el pretexto de que esta ciudad tiene como objetivo proporcionar una vida digna a los refugiados sirios que serán devueltos desde Turquía, mientras que Erdogan reveló que el objetivo final es trasladar a un millón de refugiados sirios a esas zonas.
Limpieza étnica y cambio demográfico con una alianza turco-qatarí
En este contexto, Laila Musa, representante del Consejo Democrático Sirio en El Cairo, declaró a Target Platform que Turquía tiene un proyecto con vistas a todo el norte sirio, según se desprende de la información turca desde hace tiempo, llamado Wilayat de Alepo, para cuya puesta en marcha Ankara se ha aprovechado de las condiciones dejadas por la crisis siria, que ha empeorado la situación interna, y por medio de las operaciones de ocupación llevadas a cabo con la colaboración con algunos otros países.
Laila Musa añadió que, mediante la ocupación de las regiones y zonas administradas por el llamado “Gobierno de Salvación”, que está directamente afiliado a Turquía, el Estado turco aplica lo que se conoce como el Pacto Milli, ya que vincula estas zonas de un modo u otro con otras regiones del lado turco. Sin embargo, Ankara no se contenta sólo con esto, sino que quiere perpetrar cambios demográficos y limpieza étnica en esas zonas.
Musa también declaró que las operaciones de limpieza no se basan únicamente en la etnia, sino que también hay una limpieza cultural mediante la cual Turquía practica todos los medios de exclusión en esa región; y también colabora el Estado de Qatar, que ha contribuido en gran medida con Turquía a la ejecución de este proyecto mediante la creación de asentamientos. De hecho, hemos sido testigos de cómo se han creado un gran número de asentamientos en la ciudad de Afrin, y hace unos días tuvo lugar la inauguración de un nuevo asentamiento en la ciudad de Jarablus con la participación del ministro turco de Interior, que también está financiado por Qatar.
La identidad siria en el punto de mira
Además, Moussa cree que Turquía está atentando contra la identidad y soberanía siria, por lo que todos los esfuerzos que Turquía está llevando a cabo buscan además separar tierras de Siria, vincular la región siria al territorio de Turquía y lograr la remodelación de la composición demográfica en el norte de Siria mediante el establecimiento de asentamientos y el traslado de refugiados sirios procedentes de otras regiones Sirias para alojarlos en esos asentamientos. De hecho, esto es algo que crearía un conflicto intra-sirio.
Señala que la ciudad de Afrin era un modelo para este proyecto, ya que Turquía desplazó a todos los residentes de Afrin y asentó a refugiados y sirios desplazados de Idlib, Ghouta y otras regiones sirias, además de cambiar los nombres de los lugares y la educación al turco y el uso de la moneda turca. Además, hizo todo lo que podía contribuir a alterar el eje de la historia y la identidad de la región, así como otros aspectos que suponen un gran peligro para Siria.
Un crimen contra la humanidad
El representante de la Administración Autónoma en El Cairo confirmó que lo que está haciendo Turquía, es decir, construir estos asentamientos y cambiar la composición demográfica, constituye de hecho un crimen contra la humanidad cometidos por el régimen turco contra el pueblo sirio, sobre todo porque estos crímenes se cometen durante la invasión de esas zonas, que aún continúa, incluido el hecho de que son crímenes que violan todas las cartas y leyes y pactos internacionales.
Leila Moussa indicó además que desde el primer día de la ocupación turca, se ponen de relieve todos los crímenes cometidos por Turquía, ya sea su apoyo al terrorismo o las operaciones de cambio demográfico y limpieza étnica, ya que luego se preparan informes documentados que se presentan a todas las instituciones y partes interesadas en este asunto. Y añadió: “Pero, por desgracia, no hay movimientos serios en esta vía ni respecto a lo que ofrecemos, y por eso Turquía aprovecha esta circunstancia y sigue adelante con sus prácticas en Siria, y el resultado ha sido el anuncio de la construcción de un nuevo asentamiento en Jarablus”.
Al final de sus declaraciones, Moussa se refirió a la posición del gobierno de Damasco sobre los crímenes turcos y dijo que, de una manera u otra, el gobierno de Damasco tiene parte de responsabilidad. Por ejemplo, la situación en Afrin se basó en un trueque de acuerdo con los resultados de Sochi y Astana, y Ghouta fue reemplazada por Afrin, y en cuanto a las acciones de Turquía desde marzo de 2018, el gobierno sirio ciertamente tiene parte de esta responsabilidad, así como los países que participan en este trueque.
Explotación de la crisis de los refugiados sirios
Inmediatamente después de ganar las elecciones presidenciales, Erdogan anunció las características de su plan durante el próximo período en relación con el norte de Siria, concretamente manipulando la cuestión de los refugiados para poner en práctica sus planes que pretenden cambiar la composición demográfica en esas zonas, ya que dijo que las instituciones estatales y las organizaciones civiles han construido casas de ladrillo en el norte de Siria. Además, también está en marcha la creación de nuevas viviendas para acoger a cerca de un millón de sirios con apoyo qatarí.
Erdogan indicó que su ministro del Interior, Suleiman Soylu, había viajado al norte de Siria y supervisado la colocación de la primera piedra del proyecto de viviendas, señalando que este proyecto se enmarca en lo que denominó el establecimiento de la infraestructura para el retorno voluntario de los refugiados sirios a su país.
Por su parte, Mahmoud El-Shennawy, redactor jefe de la Agencia Egipcia de Noticias de Oriente Medio, dijo en declaraciones a Target Platform que el proyecto que se acordó entre el Fondo de Qatar para el Desarrollo y la Presidencia turca de Gestión de Emergencias y Catástrofes, para poner la primera piedra de un proyecto de ciudad en el norte de Siria, forma parte de un “plan de Erdogan, que no es nuevo, en cambiar la composición demográfica de esas zonas explotando la crisis de los refugiados sirios y comerciando con ella en operaciones de extorsión y marcando puntos políticos, añadiendo a sus ganancias de lo que hizo de construir una zona de amortiguación a través de un grupo de operaciones militares en el noreste de Siria”.
Al-Shennawi afirmó que los esfuerzos de Erdogan se centran en cambiar la demografía en las zonas que ocupa en el norte de Siria y que tomó medidas apoyando a organizaciones terroristas con el pretexto de asegurar las fronteras, ya sean estas organizaciones mercenarias o las que se encubren con lemas de yihad y otros, y que esto es paralelo al desplazamiento de la población autóctona así como al asentamiento de turcos, no sólo sirios, en clara violación de la soberanía de Siria.
El redactor jefe de la Agencia de Noticias de Oriente Medio confirmó que lo que está haciendo el presidente turco ha provocado la propagación de organizaciones terroristas en esas zonas durante los últimos años y que la cuestión del reasentamiento de los refugiados sirios que huyeron a Turquía durante los años de la crisis no es más que una reproducción de la cuestión de los refugiados de otra manera mediante el establecimiento de una ciudad completa y la explotación de la vulnerabilidad de los refugiados durante mucho tiempo.
Por último, Al-Shennawi añadió que esto significa que Siria no está cualificada para recibir a sus refugiados que huyeron debido a la destrucción de las zonas de las que fueron deportados y esto es, de hecho, un derecho que se pretende anular, pero el objetivo de Erdogan es conocido, y después de ganar las elecciones presidenciales, seguirá adelante con sus planes, que no nacen de este momento.
FUENTE: Ismael Mohammed / Traducido y editado por Rojava Azadi Madrid/ www.kurdistanamericalatina.org