La huelga de hambre iniciada por los presos políticos en cárceles turcas para exigir la libertad física del líder popular kurdo Abdullah Öcalan y una solución política a la cuestión kurda, así como el fin de la tortura, suma ya 115 días de acción.

Abdullah Öcalan, Ömer Hayri Konar, Veysi Aktaş y Hamili Yıldırım, recluidos en la isla-prisión turca de Imralı, llevan 36 meses sin poder reunirse con sus familiares y abogados. Permanecen en un restado de régimen agravado al margen de toda legalidad, tanto nacional turca como internacional.

Para poner fin al aislamiento en Imralı y garantizar la libertad física de Abdullah Öcalan, el 10 de octubre de 2023 se lanzó la campaña "Libertad para Abdullah Öcalan, solución a la cuestión kurda", con declaraciones simultáneas en 74 ciudades de todo el mundo.

Como parte de la campaña, los presos políticos en Turquía iniciaron una huelga de hambre el 27 de noviembre de 2023.

Los presos dijeron en un principio que llevarían la huelga de hambre, que se lleva a cabo de forma alterna, a una nueva fase a partir del 15 de febrero, aniversario de la captura de Öcalan, si no se tomaban medidas en relación con sus demandas. Sin embargo, en un nuevo comunicado anunciaron que continuarían la huelga de hambre hasta después de las elecciones locales que se celebrarán el 31 de marzo.

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