Según el informe elaborado por 9 médicos especialistas del Departamento de Medicina Forense de la Facultad de Medicina de Kocaeli, Aysel Tuğluk padece demencia y no puede permanecer en prisión. Sin embargo, a pesar de este informe, el Instituto de Medicina Legal ha decidido no suspender la condena de Tuğluk.
Cientos de presos y presas enfermos permanecen encarcelados en las prisiones turcas. Las cárceles siguen siendo noticia por las muertes, los malos tratos, las torturas y las violaciones de los derechos humanos.
Veysi Eski, uno de los abogados de la política kurda Aysel Tuğluk, que está encarcelado en la prisión tipo F de Kandıra, ha hablado con ANF sobre la situación de su cliente.
‘Hemos empezado un nuevo proceso’
El abogado Eski ha explicado que Aysel Tuğluk quedó muy afectada tras el ataque al funeral de su madre, Hatun Tuğluk, y que empezó a sufrir demencia después de este suceso debido a las condiciones de la prisión: “Su estado empeora día a día. El Hospital Universitario de Kocaeli, que llevó a cabo todos los exámenes de Aysel Tuğluk, emitió un informe en el que decía que no podía permanecer en la cárcel. El Instituto de Medicina Forense de Estambul (ATK), sin embargo, declaró lo contrario. Este informe puso de manifiesto la politización de la institución. Como abogados de Aysel Tuğluk, no compartimos este asunto con el público porque ella no quería estar en la agenda debido a su estado de salud. Sin embargo, Aysel Tuğluk está tan enferma ahora que ni siquiera puede atender sus necesidades personales. Actualmente, Aysel Tuğluk se encuentra con dos de sus compañeras y, a partir de ahora, hemos abierto un nuevo proceso de denuncia. Por supuesto, los médicos independientes critican la contradicción entre los informes anteriores. Creemos que los médicos de la ATK no cumplen con la ética profesional médica. Haremos las solicitudes necesarias al respecto”.
Un asunto prioritario
El abogado Eski ha dicho que el Instituto de Medicina Legal se ha convertido en una tortura para los presos y las presas enfermos, y ha añadido: “El ATK se ha convertido en el punto más oscuro y ciego del corredor de la muerte para los presos enfermos. Creo que la opinión pública debería ser mucho más sensible a esta cuestión. Los colegios de abogados, la Asociación Médica Turca (TTB), tienen que hacer de esta situación su primer punto en la agenda.
Como instituciones de derechos, nos reuniremos para discutir seriamente la cuestión del ATK. En este sentido, los informes de la ATK serán traducidos y compartidos con las instituciones internacionales, y determinaremos a nivel internacional que la ATK es una institución no independiente”.