El Tribunal Supremo de Irán confirma la pena de muerte para un preso político kurdo

La Sección Nueve del Tribunal Supremo confirmó la sentencia de muerte de Hamid Hosseinnezhad Heidaranlou, preso político kurdo de Chaldoran.

El Tribunal Supremo de Irán confirmó la sentencia de muerte de Hamid Hosseinnezhad Heidaranlou, preso político kurdo de Chaldoran.

La sentencia, dictada originalmente en julio de 2024 por el Tribunal Revolucionario Islámico de Orumiyeh (Urmia), presidido por el juez Najafzadeh, se basó en cargos de “insurrección armada” (baghi) por presunta pertenencia al Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), según la Red de Derechos Humanos del Kurdistán (KHRN).

Su apelación, presentada en agosto de 2024, fue revisada por el Tribunal Supremo, que confirmó la sentencia de muerte sin considerar su defensa.

KHRN informó que Hosseinnezhad Heidaranlou fue notificado oficialmente de la decisión de la Corte Suprema el 26 de marzo mientras se encontraba en la prisión central de Orumiyeh.

Arresto y procedimientos judiciales

El 13 de abril de 2023, los guardias fronterizos arrestaron a Hosseinnezhad Heidaranlou junto con varios ciudadanos afganos en la frontera de Chaldoran y lo llevaron al Centro de Detención de los Guardias Fronterizos de Chaldoran, donde fue interrogado durante varias horas antes de que su orden de detención se cambiara a libertad bajo fianza.

Sin embargo, la fianza no fue aceptada porque se emitió una orden de arresto a petición del Ministerio de Inteligencia de la República Islámica de Irán.

Luego fue trasladado al centro de detención del Ministerio de Inteligencia en Orumiyeh.

Una fuente había dicho previamente a KHRN que Hosseinnezhad Heidaranlou había estado detenido en el centro de detención del Ministerio durante 11 meses y 10 días, tiempo durante el cual fue sometido a severas torturas físicas y psicológicas para obligarlo a confesar su "participación" en un enfrentamiento armado entre fuerzas del PKK y guardias fronterizos iraníes, una confrontación que resultó en la muerte de ocho guardias fronterizos.

La fuente afirmó además que durante su detención, a Hosseinnezhad Heidaranlou sólo se le permitieron dos breves llamadas telefónicas con su familia y se le negaron visitas y acceso a representación legal.

Durante aproximadamente ocho meses, fue sometido a intensa presión y tortura por parte de los interrogadores de inteligencia y del agente investigador, identificado como Estiri. Finalmente, lo obligaron a firmar declaraciones preescritas por los interrogadores, a pesar de ser analfabeto e incapaz de leer el contenido.

Durante los interrogatorios y las audiencias judiciales, Hosseinnezhad Heidaranlou, a quien se le negó el derecho a designar su propio abogado debido a las objeciones del Ministerio de Inteligencia, negó todos los cargos e insistió en que sus confesiones habían sido obtenidas bajo tortura.

También presentó pruebas documentales de que viajaba a Turquía con su familia el día del enfrentamiento armado entre combatientes del PKK y guardias fronterizos iraníes. Sin embargo, el Tribunal Revolucionario Islámico de Orumiyeh, presidido por el juez Najafzadeh, rechazó las pruebas y lo condenó a muerte por el cargo de "insurrección armada" (baghi) por su presunta pertenencia al PKK, en una audiencia que duró apenas unos minutos.

Además, en la causa totalmente fabricada contra el preso político, el Ministerio de Inteligencia afirmó, sin proporcionar ninguna prueba verificable, que había ido contra las fuerzas fronterizas debido al asesinato de su cuñado, Mostafa Nouri, por parte de guardias fronterizos iraníes en 2015 mientras se dedicaba al comercio transfronterizo.

Como resultado, se le acusó de colaborar con las fuerzas del PKK durante los enfrentamientos entre ellos y los guardias fronterizos.

Hoseinnezhad Heidaranlou, nacido en 1985 y padre de tres hijos del pueblo de Segrik en Chaldoran, había trabajado como cargador de combustible y comerciante fronterizo en los últimos años.