Turquía tiene previsto completar el tramo de 64 kilómetros del muro construido en la frontera de Rojhilat (Kurdistán iraní) para finales de año. El muro se está construyendo con el fin de impedir los cruces ilegales, y hasta ahora se han completado 43 km.

Con la construcción de este muro se impondrá una nueva prohibición de pastos y mesetas en los pueblos fronterizos. El objetivo del Estado turco, que primero construyó un puesto militar y ahora está construyendo el muro cavando trincheras en la frontera, es cortar la comunicación entre los kurdos que viven a ambos lados de la frontera.

En este último mes de excavaciones se han encontrado los cadáveres de dos hombres. Los soldados de la comisaría de policía del pueblo de Axrok, en la frontera de Rojhilat, estaban patrullando cuando encontraron los cadáveres. Todavía no se ha hecho ninguna declaración sobre la identidad de los cuerpos.

Se cree que los hombres, que han sido trasladados a la morgue del Hospital Estatal de Özalp, eran refugiados.

Las autoridades afirmaron que podrían haber caído en zanjas al intentar cruzar la frontera, pero los testigos presenciales afirman que fueron asesinados tras ser torturados por soldados de ambos lados de la frontera.