Miğdat Erkek se unió al PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistán) en 1992 y fue martirizado en 1996 durante un enfrentamiento en el área triangular entre los distritos de Lice y Kulp de Amed (Diyarbakır) y el distrito Genç de Bingöl.
La familia se enteró de la muerte de su hijo a través de un libro publicado en el año 2000. El libro afirmaba que el cuerpo de Erkek había sido abandonado en el arroyo Şatos. Sin embargo, la familia nunca pudo recuperarlo.
Según años de investigación de la familia, los aldeanos descubrieron cinco cadáveres de guerrilleros en el arroyo Sarum y los reportaron a la gendarmería. Testigos presenciales declararon que los cuerpos habían sido enterrados a orillas de un pequeño arroyo junto a la comisaría de Üçdamlar. Desde entonces, se ha construido una escuela en el lugar donde se encontraba la antigua comisaría.
La madre Nefise Erkek exigió que se realizaran excavaciones en la zona: "Quiero que mi hijo tenga una tumba antes de mi partida". La familia exige que se les devuelvan los restos de su hijo en un momento en que el proceso de resolución y la búsqueda de la paz vuelven a estar en la agenda.
Para ello, la familia Erkek presentará una denuncia ante la sección de Amed de la Asociación de Derechos Humanos (İHD).