13 presos de la prisión cerrada tipo T de Düzce participan en la huelga de hambre en las cárceles contra el aislamiento del líder kurdo Abdullah Öcalan. Vedat Gültekin, uno de ellos, afirmó que continuarán la huelga de hambre a pesar de todas las dificultades en su llamada telefónica semanal con su familia.

Gültekin dijo que 13 prisioneros no han sido remitidos al hospital durante los últimos dos años: “Mientras los presos comunes son llevados al hospital, no se llevan presos políticos. Hemos presentado varias peticiones, pero la administración penitenciaria ni siquiera responde. Yo también estoy enfermo. Sin embargo, no me han llevado al hospital. Mi condición está empeorando porque no he recibido tratamiento. Debe reconocerse nuestro derecho al tratamiento".

La familia de Gültekin, protestando por el maltrato en prisión, declaró: “No queremos que se niegue el derecho de nuestros hijos al tratamiento. 13 presos no han sido llevados al hospital durante dos años. Si la administración de la prisión no tiene dinero, podemos pagarlo. Dejemos que nuestros hijos sean tratados".