Gülizar Taşdemir, muy conocida por su lucha como miembro del Movimiento de Liberación de Kurdistán, había viajado a Noruega para recibir tratamiento médico, y ahora corre el riesgo de ser extraditada a Turquía.

Gülizar Taşdemir, que luchó como guerrillera en las montañas de Kurdistán durante casi 27 años, solicitó el asilo político en Noruega en septiembre de 2015 para recibir tratamiento médico.

Las autoridades noruegas denegaron su petición de asilo, por lo que viajó hasta Alemania para solicitar ahí el asilo.

Sin embargo, Taşdemir fue extraditada desde Alemania hasta Noruega, el país donde solicitó el asilo por primera vez, debido al acuerdo de Dublín.

En este momento, Noruega ha comenzado el proceso para poder extraditarla a Turquía.

La opinión pública sabe muy bien que Taşdemir, que luchó como guerrillera durante muchos años en las filas del PKK, será sometida a torturas en Turquía en caso de ser extraditada.

Especialmente después del 15 de julio de 2016, las imágenes de torturas que realiza el estado turca han sido desveladas, destapando así las prácticas del estado turco en cuanto a la realización de torturas.

Mientras los abogados de Taşdemir intentan detener la extradición de su cliente a Turquía, las instituciones kurdas están preparando un plan de acción urgente.