UNICEF llamó la atención sobre la crisis humanitaria en Afrin en Ghouta oriental, en Siria, donde continúa la guerra.

Con respecto a la situación en Afrin que está bajo ataques genocidas del estado turco, Marixie Mercado, vocera de UNICEF en Ginebra, dijo lo siguiente en una conferencia de prensa en el Palacio de las Naciones en Ginebra;

"Informes desde adentro de Afrin indican que docenas de niños han muerto y muchos más heridos desde el comienzo de las hostilidades en el distrito.

Durante los últimos 10 días, los niños y las familias han sufrido una grave escasez de agua, ya que según los informes, se ha cortado la fuente de agua de la ciudad de Afrin. Las familias dependen del agua no potable y de las perforaciones, lo que puede aumentar el riesgo de enfermedades transmitidas por el agua para aproximadamente 250,000 personas.

Según fuentes locales, la mayoría de las instalaciones de salud están cerradas y las clases también se suspenden.

Según los informes, a los civiles se les impide huir del distrito y la mayoría de las personas desplazadas de las zonas rurales se están mudando a la ciudad de Afrin. No existe un mecanismo oficial de seguimiento de desplazamiento, pero las fuentes locales estiman que hay alrededor de 50,000 personas desplazadas en la ciudad. Las familias son hospedadas por familiares y amigos, en tiendas, edificios gubernamentales y escuelas.

Sin embargo, más de 7.000 personas han llegado a los pueblos de los alrededores y a la ciudad de Alepo. Los equipos de UNICEF que han visitado estos lugares informan que las personas se quedan en mezquitas y, a veces en la calle, con asistencia humanitaria muy limitada. Las instalaciones de salud en estos lugares están desbordadas y existe una necesidad inmediata de brindar asistencia en materia de agua y saneamiento ".