Un grupo de 14 activistas están en huelga de hambre en Estrasburgo para demandar el fin del régimen de aislamiento impuesto al representante del pueblo kurdo, Abdullah Öcalan.

El grupo se unió a la huelga de hambre iniciada por la diputada del HDP por Hakkari, Leyla Güven, quien ya lleva casi 100 días de ayuno.

Cansu Özdemir, copresidenta del grupo parlamentario Die Linke en el Estado de Hamburgo, ha visto por sí misma la situación de los activistas y ha confirmado que su salud se está deteriorando con rapidez.

‘Las medidas son insuficientes’

Hasta ahora, ha dicho Özdemir, las reacciones ante la huelga de hambre y la demanda de los activistas han sido insuficientes. Europa debería asumir su responsabilidad y dirigirse a Turquía para instarle a responder a las demandas de los activistas, en lugar de favorecer sus relaciones económicas con Ankara.

Özdemir ha confirmado que presentó una moción en el Parlamento para instar al gobierno alemán a actuar de cara a acabar con el régimen de aislamiento impuesto al representante del pueblo kurdo, y ha añadido que desafortunadamente está moción permanece congelada.

Para acabar, Özdemir ha añadido que la presión y las acciones del pueblo kurdo conducirán a una solución a la cuestión kurda.