Desde el 25 de enero de 2021, el pueblo kurdo celebra todos los miércoles una sentada en la plaza de las Naciones, donde se encuentra la Oficina de la ONU en Ginebra, para exigir la libertad del líder político kurdo Abdullah Öcalan.

La acción forma parte de la campaña Dem Dema Azadiyê, y cada semana los activistas reparten folletos informativos sobre el paradigma de la libertad de Öcalan, el régimen de aislamiento que se le impone en Imrali, en Turquía, y por qué debe ser liberado.

Esta semana, la acción comenzó con un minuto de silencio por los caídos mártires en la Lucha por la Libertad del Kurdistán en la persona de Veysi (Bubo) Taş y Mehmet Akar, que prendieron fuego a sus cuerpos para protestar contra el aislamiento impuesto a Öcalan.

El co-presidente del Centro de la Comunidad Democrática Kurda de Ginebra, Erdal Atasoy, rindió homenaje a Taş y Akar en su discurso. Atasoy dijo: "Hoy, la ONU y los Estados occidentales, que son los artífices de la conspiración internacional [que condujo a la detención de Öcalan en 1999], guardan silencio contra la tortura del aislamiento impuesto a nuestro líder, y contra la guerra y los crímenes contra la humanidad dirigidos contra nuestro pueblo. Deben saber que 2023 será el año de la libertad del pueblo kurdo y de nuestro líder. Nosotros y nosotras, el pueblo kurdo, somos conscientes de ello y una vez más prometemos ser leales a la memoria de nuestros mártires."

Tras Atasoy, Ramazan Baytar, representante de Relaciones Exteriores del Consejo Democrático Kurdo Suizo (CDK-S), leyó un comunicado de prensa en francés.

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