La Unión Europea firmó un acuerdo sobre los refugiados con el régimen de Ankara en marzo de 2016. El acuerdo dirigido por Alemania estipulaba que unos 3 millones de refugiados que partieron de Siria, Irak y Afganistán para llegar a Europa serían retenidos en Turquía y el régimen de Erdogan recibiría 6 mil millones de euros a cambio.
Bruselas ha cmplido la mitad de los pagos hasta la fecha, y en la cumbre de la UE en Varna el pasado mes de marzo, se decidió que los 3 mil millones de euros restantes se entregarían a Ankara lo antes posible. Un tercio de los 3 mil millones de euros en el primer paquete provino del presupuesto de la UE, y los dos tercios restantes se dividieron entre los países miembros de acuerdo con sus presupuestos.
Por ser la economía más fuerte de la UE, Alemania tuvo que pagar 500 millones de euros. La Comisión de la UE quería pagar a Ankara los restantes 3.000 millones de euros con el mismo plan, pero bajo la dirección de Alemania, países como Francia, Austria, Suecia, Dinamarca y Finlandia se negaron a hacerlo, diciendo que el gobierno de Erdogan no ha implementado los proyectos para los que recibió fondos.
Alemania deja de supervisar el dinero
El gobierno de Merkel ha renunciado a su insistencia y ha aceptado el plan de pago de la UE. Esta repentina decisión del gobierno federal se produjo antes de la visita de 3 días a Alemania del presidente turco Erdogan.
Según el diario Bild, el Ministerio Federal de Finanzas envió una propuesta al Parlamento Federal para pagar 215 millones de euros a Turquía como parte del acuerdo sobre los refugiados.
Se espera que el Parlamento Federal dé luz verde al pago hoy. La administración de Berlín había presionando anteriormente a Bruselas para que "el segundo paquete monetario no se cumpliera hasta que se implementaran los proyectos preparados con Turquía".
El AKP acumula fondos de la UE
La institución internacional de medios de comunicación European Investigative Collaborations (EIC) llevó a cabo un estudio que mostró que el acuerdo con los refugiados no estaba funcionando. El estudio revelaba que el dinero que Turquía recibió para gastar en los refugiados ha desaparecido y que los proyectos para los que la UE proporcionó fondos no se han implementado.
Hasta la fecha, solo se han implementado la mitad de los proyectos de ayuda humanitaria a los refugiados y aquellos implementados no han sido inspeccionados. La UE proporcionó fondos prioritarios para hospitales y escuelas, que el régimen de Erdogan recibió en efectivo, pero la construcción de estos todavía no ha comenzado.
Se otorgaron 90 millones de euros para hospitales en Kilis y Hatay, pero no se ha iniciado ninguna de las construcciónes. Según el estudio del EIC, solo se han comenzado a trabajar para 8 de las 39 escuelas planificadas. Además de eso, hay 15 millones de euros asignados a la Cámara Turca y a las Bolsas de Productos Básicos para apoyar a los empresarios y los inversores que se refugiaron en Turquía que no pueden ser documentados o contabilizados.