Se ha rendido homenaje a Nurcan Bakır en el Centro de la Comunidad Democrática Kurda de Colonia. El evento ha comenzado con un minuto de silencio en memoria de los mártires de la lucha kurda por la libertad.

Después, se ha proyectado un vídeo sobre la vida de Bakır y Zahide Yetisen se ha dirigido a la multitud:

“Nurcan tuvo una gran influencia sobre nosotros. Después de que se uniera [a las filas de la guerrilla], ocho de sus primas la siguieron a la guerrilla. Yo también estuve en prisión entre 1994 y 2003. Coincidí con Nurcan un año en Sivas”.

Añadiendo que Bakır fue siempre un ejemplo revolucionario, Yetişen continuó: “La capturaron herida y la torturaron. Pero nunca dijo una palabra durante los interrogatorios”.

Y añadió: “Hay numerosas historias desconocidas o que todavía están por escribir en nuestra lucha. Una de esas historias es la de Nurcan. Ella anhelaba su país. Quería vivir en su país, aunque fuera tras las rejas. Siento que su alma se alivió cuando la enterraron en su pueblo. Ese mismo día, cuatro compañeros cayeron en Shengal. Recuerdo a aquellos mártires con respeto. A ellos les debemos la lucha”.

Nurcan Bakır participó de un ayuno estricto en prisión que acabó con su vida.