El presidente Recep Tayyip Erdogan, habiendo enmendado su relación con el estado alemán, visitará de forma oficial el país, por primera vez en años, durante los días 28 y 29 de septiembre.
La oposición alemana y una parte importante de la población se oponen a que Erdogan sea recibido con honores de jefe de estado.
Por su parte, Erdgoan quiere convertir su visita al estado alemán en un espectáculo.
El deseo del presidente turco es celebrar una manifestación masiva durante su estancia en el país germano para saltarse las prohibiciones impuestas por la administración de Berlín en relación a la participación de ministros y políticos del AKP en actos públicos. Estas prohibiciones se pusieron con motivo del referéndum constitucional del 16 de abril y las elecciones del 24 de junio. La opinión pública alemana se ha mostrado en contra de la realización de estos eventos.
Según una encuesta realizada por INSA y publicada ayer martes, el 65,8% de los alemanes no quieren que Erdogan se dirija a los turcos residentes en el país en un evento público. Solo el 14% dijo estar de acuerdo mientras que el 19% no mostró una opinión ni favorable ni en contra.
Colonia todavía no ha respondido a Erdogan
Los medios informaron la última semana sobre los preparativos que el AKP había comenzado para que Erdogan se pudiera manifestar con sus simpatizantes el 29 de septiembre en Colonia.
Se han producido distintas reuniones para tratar de solicitar un espacio público para el acto en Colonia. También en Berlín se han realizado distintas iniciativas con el mismo propósito, en previsión de que no pudiesen encontrar ningún lugar en la provincia de Norte Renania-Westfalia.
Actualmente, ninguno de los locales más amplios ha respondido a las peticiones el AKP en Colonia. A pesar de la solicitud del régimen de Erdogan, la administración de Berlín no ha dado su aprobación a la manifestación planeada por Erdogan.
Un grupo de representantes del estado han recalcado que solo han invitado a Erdgoan “para una visita oficial, no eventos privados o manifestaciones”. Al mismo tiempo han expresado que no están a favor de permitir que Erdogan convierta su visita en un espectáctulo.
La polémica viene de lejos. Erdogan ya celebró un evento, como el que pretende organizar, en Colonia en el año 2008. En aquella ocasión Erdogan provocó un polémico debate en la sociedad alemana al ignorar los crímenes del estado turco y al afirmar que: “Nadie puede exigiros que seáis tolerantes con la asimilación. La asimilación es un crimen contra la humanidad. Recordarlo.”