Manifiesto antimonárquico de catalanes, vascos y gallegos
Los representantes de los partidos independentistas vasco, catalan y gallego han confirmado su rechazo unitario a la Monarquía en el Parlamento español.
Los representantes de los partidos independentistas vasco, catalan y gallego han confirmado su rechazo unitario a la Monarquía en el Parlamento español.
Los portavoces de los partidos independentistas catalán, vasco y gallego, con representación en el Parlamento de Madrid, hicieron público un manifiesto de rechazo a la monarquía.
Además, 49 diputados no asistieron al discurso de Felipe VI, en la apertura de la XIV legislatura.
El manifiesto antimonárquico está escrito en las tres lenguas de estas nacionalidades históricas, y en castellano, y se titula "No tenemos rey. Democracia, libertad y repúblicas".
El texto dice: "Las sociedades catalana, vasca y gallega rechazan mayoritariamente la figura de una institución anacrónica heredada del franquismo que se basa en mantener e imponer la unidad de España y sus leyes".
Los grupos independentistas añadieron: "El Rey debe dejar de ejercer su tutela sobre la ciudadanía y sobre los gobiernos y parlamentos que emanan de la voluntad popular. Sólo así se podrán encontrar soluciones basadas en el respeto a la voluntad popular, la libertad y la democracia".
El abierto rechazo a la institución monárquica por parte de los grupos catalanes Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Junts Per Catalunya (JpCat) y la CUP, así como del grupo vasco EH-Bildu y el Bloque Nacionalista Gallego (BNG), fue ampliamente destacado por los medios de comunicación españoles y criticado por los partidos de ámbito estatal, como un nuevo precedente. Su relación con el actual conflicto catalán es innegable.
La fuerza actual de los partidos independentistas hace prácticamente imposible la estabilidad del actual Gobierno sin estar de acuerdo con algunos de ellos. En efecto, sólo el voto a favor de los 6 diputados del Partido Nacionalista Vasco (PNV), sumado a la abstención de los de ERC , EH-Bildu y BNG, permitió la formación del actual Gobierno de coalición del Partido Socialista Obrero Español y de Unidas Podemos.
Por su parte, el Partido Nacionalista Vasco expresó su "malestar" por no haber sido invitado a redactar el manifiesto contra la Monarquía, aunque fue muy cuidadoso al decir si realmente lo habría firmado.
Tanto los medios de comunicación como los partidos españoles evitaron entrar en las razones expuestas por los independentistas, dado que la Monarquía es, en efecto, heredera legítima y directa de la dictadura franquista, y nunca se sometió a referéndum, sino que se incluyó directamente en la Constitución de 1978, como parte inseparable de la llamada Transición Democrática.