En la céntrica plaza del Kastello, en la ciudad italiana de Turín, los kurdos y otra gente en solidaridad han protestado contra el régimen agravado de aislamiento impuesto al kíder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan por el Estado de Turquía.

Durante la protesta, los manifestantes han exigido el fin de las condiciones de aislamiento impuestas a Öcalan coreando eslóganes como “Viva Öcalan”, “Viva Kurdistán” y “Bijî Serok Apo” (“larga vida al líder Öcalan”).

A Öcalan no se le ha permitido reunirse con sus abogados desde el 27 de julio de 2011; la última vez que se reunió con la Delegación de Imrali fue en abril de 2015 y la última vez que vio a su familia fue el 11 de septiembre de 2016. No se ha oído nada de Öcalan en todo este tiempo, y las preocupaciones sobre su salud y su seguridad continúan aumentando.

A principios de semana, los abogados del líder kurdo solicitaron visitar a su cliente por 786ª vez. Las 785 solicitudes previas desde el 27 de julio de 2011 fueron rechazadas por razones arbitrarias como “condiciones climáticas”, “problemas con el barco”, “barco en reparación” o “estado de emergencia (OHAL)”.