En su vuelo de regreso de Azerbaiyán, el presidente Recep Tayyip Erdoğan habló con los periodistas sobre la nueva constitución, las conversaciones con Siria y los debates sobre su reelección.

Erdogan señaló que la nueva constitución sería un contrato social que trascendería los partidos políticos: "Nuestra intención con la nueva constitución no es crearnos un espacio, asegurar intereses individuales ni encumbrarnos. Permítanme dejar esto claro de una vez por todas: no queremos una nueva constitución para Tayyip Erdoğan, sino para 86 millones de personas".

En su declaración el presidente turco anunció que había designado un equipo de 11 miembros para trabajar en el tema y que el trabajo comenzaría después del Eid al-Adha (del 6 al 9 de junio), y agregó: “la Constitución es un contrato social que no abarca a un solo partido, sino a toda la nación”.

Al criticar la postura del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Erdoğan dijo: "Si adoptan una postura conciliadora, ¿por qué no íbamos a colaborar con ellos?". Añadió que no existía tal postura dentro del CHP.

Erdoğan afirmó que consideraban positivo el acuerdo alcanzado entre las Fuerzas Democráticas Sirias (SDF) y el régimen gobernante en Damasco en el contexto de la cuestión kurda, y añadió: “Lo más importante es que las promesas se cumplan de acuerdo con el calendario establecido en el acuerdo”.

Al recordarle que no tenía intención de volver a presentarse como candidato, Erdoğan vinculó su futuro político a la voluntad popular: "Hemos entrado en cada contienda con confianza en nuestra nación. Hoy y mañana, seguiremos escuchando a nuestra nación. Adaptaremos nuestro rumbo al camino que nos han trazado".