El 23 de octubre será un día que siempre recordaremos con mucho respeto y orgullo. Recordaremos a la compañera Asya Ali y al compañero Rojger Helin y la acción histórica que llevaron a cabo. Una acción en la que supieron sorprender al enemigo en Ankara, en su propio centro. Desafiaron el centro armamentístico de alta tecnología de TUSAŞ. Un centro de poder donde la muerte es instrumentalizada, negociada y planeada. Allí donde se fabrica la muerte, las compañeras nos enseñaron vida. Para hacerlo tuvieron que sacrificar sus propias vidas. Así una vez más, con la fuerza del Movimiento de Liberación de Kurdistán, las compañeras nos enseñaron el grado de voluntad, conciencia y entrega para defender y hacer posible la vida libre.
Supieron elegir el lugar y también el momento. Se enfrontaron a siglos de opresión y negación de la humanidad. Se opusieron a toda la violencia que como pueblo kurdo han sido sometidos –desde la prohibición de su lengua, su cultura, el robo de sus tierras, la tala de sus árboles y su propia existencia. Centenares de genocidios, miles y miles de bombas, de insultos, de engaños. Su acción conjunta, fue un golpe duro contra la mentalidad patriarcal. Con su acción, los mártires Asya Ali y Rojger Helin continuaron el legado de aquellas y aquellos que no bajan la cabeza, que no dejan asimilarse, que no se rinden. Lo hicieron con la fuerza del Movimiento de Liberación de Kurdistán. Lo hicieron como militantes que continúan el legado de 50 años de organización, liderazgo y entrega para su pueblo y por la humanidad. Durante años de esfuerzo, aprendizaje, puesta en práctica, compañero y compañera se empaparon de las ideas de Rêber Apo. De quien nos abre camino luchando y resistiendo cada día ante las condiciones más duras y crueles en la prisión de Imrali. Supieron elegir el momento. Un momento decisivo para dar respuesta al complot que empezó 26 años atrás, también en octubre. Un complot contra la posibilidad de paz y justicia en Kurdistán, en Oriente Medio y en el mundo- que mantiene a Rêber Apo encarcelado en aislamiento des de más de 25 años. En el momento en que llevaron a cabo la acción habían pasado más de 3 años sin tener noticias suyas. A pesar de miles de campañas, de acciones de la guerrilla en las montañas, de huelgas de hambre, de vidas sacrificadas, de recogida de firmas, de manifestaciones, de exposiciones, festivales, tanto esfuerzo y tantas vidas, el aislamiento continúa. Tanto la mártir Asya y el mártir Rojger supieron convertir la rabia e injustica en respuesta. Supieron escoger la semana en la que décadas atrás, la mártir Bêrîtan1 dio su vida luchando contra la traición. La acción de Ankara continua la historia de Bêrîtan y el legado de tantas otras y otros luchadores por la libertad. Especialmente de aquellas que, ante tanta crueldad, violencia e injustica, tuvieron el valor de entregar su propia vida; dejar su vida individual, pasando a la acción y haciéndose una, con todas las que dieron la vida por sus ideales de libertad -como las mártires Zilan, Mazlum Dogan, Zekiye, Ronahî, Bêrîtan, Sema, Viyan, Sara y Ruken y Erdal y Rojhat.
El 23 de octubre lo recordaremos también con dolor ante la gran pérdida que supone. Pero su recuerdo, valor y el llamado de sus llamas son más grandes, son inmortales. Con gran detenimiento supieron ponerle palabras. Antes de llevar acabo la acción, escribieron cartas que no pueden ser más que leídas. Dirigiéndose a Rêber Apo, a su pueblo, a sus compañeras y compañeros, y a sus familias. Un llamado para continuar defendiendo la vida y las ideas de Rêber Apo, con una gran consideración y recuerdo a las que lo hacen des de la cárcel bajo las situaciones más duras. Cada una de las cartas transmite un grado de conciencia y libertad que despierta grandes sentimientos, inspiración y grandes preguntas para seguir sus sueños y su lucha por la libertad. Una inspiración que no entiende de muros y se expande por todo el mundo ¿Qué nivel de conciencia y libertad, hacen posible que el ser humano pueda valorar y amar tanto la vida que esté dispuesto a darla para defenderla?
El 23 de octubre también será recordado porque tras 3 años de no recibir noticias de Rêber Apo, se consiguió una visita. Supimos que su salud y fuerza siguen firmes y claras para la solución política. Aunque como sus palabras nos recordaron, el aislamiento continúa. Tras la visita, volvieron a castigar a Rêber Apo tres meses de aislamiento absoluto. Ante el chantaje y la guerra sucia del estado de Turquía y sus aliados, debemos mantenernos alerta, activas, y luchadoras. Demostrando - como lo hicieron las compañeras Asya y Rojger - que entendiendo el enemigo y la fuerza que tenemos somos capaces de grandes acciones, palabras y sentimientos. Solo entendiendo esto podemos explicar que su búsqueda de la verdad pudiera hacer saltar por los aires la falsa seguridad del estado. Demostraron una vez más que el poder y su maquinaria de muerte, no pueden triunfar. Allí donde haya voluntad y conciencia, podremos defender y conseguir seguridad real para una vida libre y bella.
1 Bêrîtan fue una vanguarda de las guerrillas del Movimento de Liberacion de Kurdistan. Cayo martir el 25 de octubre en 1993 en las Montanas de Kurdistan enfrontadose a la traicion de los peşmergas, fuerzas militares de Bashur – Sur del Kurdistan - complices de la politica Turca y sus aliados.
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