El pánico al coronavirus se está extendiendo en Van, Ağrı, Hakkari e Iğdır, en las fronteras con el Kurdistán oriental. El establecimiento de hospitales de campaña en Ağrı y Van para contrarrestar posibles emergencias de coronavirus ha causado pánico. La gente ha acudido en masa a las farmacias de Hakkari, Van, Ağrı y Iğdır para comprar mascarillas. De hecho, se han acabado. Sólo están disponibles en el mercado negro, donde se venden a precios desorbitados.

Las mascarillas que cuestan 3 liras turcas en las farmacias, se venden a 15 en el mercado negro.

Los pasos fronterizos en Van, Ağrı, Hakkari e Iğdır han sido cerrados en tanto que las muertes por coronavirus en Irán han aumentado a 30. Decenas de personas que viajan de Rojhilat/Irán a Bakur han sido puestas en cuarentena por posible infección del coronavirus.

30 personas del Kurdistán oriental (o Rojhilat) que intentan cruzar la frontera de Esendere a Hakkari se mantienen retenidas en el paso, mientras que otras 30 personas no pueden salir de Hakkari.

Indicando que no hay suficientes médicos y equipo en los hospitales, la gente dice que el establecimiento de hospitales de campaña muestra cuán grave es la situación. Aunque se dice que las puertas de la frontera están cerradas, se afirma que muchos iraníes siguen llegando a Van todos los días.