Según la Red de Derechos Humanos de Kurdistán (KHRN), la oleada masiva de arrestos de ecologistas continúa en la ciudad de Kamyaran en Kurdistán Este (Rojhilat).

El domingo por la mañana, Amanj Ghorbani fue arrestado en su lugar de trabajo, el Departamento de Medio Ambiente. Por otro lado, las fuerzas de seguridad de la República Islámica de Irán asaltaron la casa de Bakhtiar Kamangar, asalto que condujo a su arresto y a su traslado al Centro de Detención de Sine (Sanandaj).

Con el arresto de los ciudadanos kurdos mencionados, el total de arrestados en Kamyaran ha llegado a 9 en tan solo una semana.

Farhad Mohammadi (abogado), Fazel Ghayatias, Reza Asadi, Hadi Kamangar, secretario y miembro de la rama kurda del Partido Unidad Nacional, habían sido detenidos el 1 y 2 de enero de 2019.

Por su parte, Isa Feizi, Rashid Montazeri y Hussein Kamangar, antiguos miembros del partido, también fueron arrestados dos días más tarde.

La mayoría de los arrestados están activos en el ecologismo, incluyendo a Hussein Kamangar, que ya había sido arrestado por cuestiones políticas.

Los encargados de los arrestos de Amanj Ghorbani, un periodista y conocido ecologista así como a Bakhtiar Kamangar en Kamyaran fueron los servicios secretos.

Su participación en los esfuerzos colectivos contra los incendios en las montañas de Shaho y en la elaboración de investigaciones académicas estratégicas en el campo medioambiental, son las actividades principales de Ghorbani como experto en medioambiente y funcionario en Kamyaran.

Según la KHRN, los últimos arrestos han sido realizados por el Departamento de Operaciones del Directorio General de Información (Itllat) en la ciudad de Sanandaj.

Las fuerzas de seguridad han recurrido a la fuerza física y a la violencia verbal durante las redadas, incluso  colocaron sacos sobre las cabezas de los arrestados para trasladarlos al centro de detención. Todos los arrestados han sido llevados al Centro de Detención de Sanandaj de la Oficina de Información para ser interrogados.

La KHRN ha expresado su honda consternación por los últimos arrestos, la dura violencia empleada durante las redadas, así como sobre el paradero de los arrestados y el trato recibido por ellos. También se han mostrado preocupados por los posibles cargos en su contra.

“Condenamos los arrestos de los activistas kurdos. Hacemos un llamamiento a los medios internacionales y a las organizaciones de derechos humanos para que usen cualquier medio a su alcance para liberar a los activistas kurdos y que protesten ante los arrestos”, ha concluido la KHRN.