Bruxelles Dévie condena las redadas contra las televisiones kurdas de Denderleeuw

Bruxelles Dévie denuncia las redadas policiales contra las cadenas de televisión kurdas con sede en Denderleeuw el 23 de abril, afirmando que se trata de otro intento de asfixiar al movimiento kurdo en Europa.

Represión

El medio de comunicación independiente belga Bruxelles Dévie ha emitido un comunicado condenando las redadas de la policía belga en los locales de los medios de comunicación kurdos Stêrk TV y Medya Haber en Denderleeuw, no lejos de Bruselas en Bélgica. Las redadas tuvieron lugar el 23 de abril.

Según el comunicado de Bruxelles Dévie: "Las redadas, llevadas a cabo por la policía federal belga, se producen en un momento en el que se han cometido numerosos ataques contra miembros de la comunidad kurda, desde que una familia kurda de la provincia de Limburgo fuera atacada en su domicilio el 24 de marzo. Al llevar a cabo estos registros, el Estado belga, al igual que sus vecinos franceses y alemanes, muestra su intención de reprimir al movimiento kurdo".

El comunicado continúa: "El registro tuvo lugar en plena noche, sin notificación previa a los abogados ni a los representantes de las empresas afectadas y, por tanto, se llevó a cabo en un contexto completamente ilegal. Además, de forma muy simbólica, los registros tuvieron lugar durante el día internacional de los medios de comunicación kurdos, que luchan por su libertad allí donde el pueblo kurdo está oprimido."

Subrayando que "según varios periódicos, las redadas policiales belgas se llevaron a cabo a petición del Estado francés", Bruxelles Dévie añadió que "Francia, en total complicidad con el Estado turco, deportó recientemente a Turquía a tres activistas kurdos. Además, al mismo tiempo que esta redada policial en Bélgica, 9 personas de origen kurdo fueron detenidas en Île-de-France".

El comunicado agregaba: "Queremos afirmar nuestro apoyo a la prensa kurda que lucha por la libertad de un pueblo oprimido y por la propagación de una lengua y una cultura que le son propias. Las redadas son otro intento de asfixiar al movimiento kurdo en Europa".

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