Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha presentado una denuncia sobre crímenes de guerra cometidos contra periodistas palestinos en Gaza (la tercera denuncia de este tipo desde 2018) y contra un periodista israelí, asesinado y herido en el curso de su trabajo. Estos reporteros fueron víctimas de ataques que constituyen, como mínimo, crímenes de guerra, lo que justifica una investigación por parte del fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI).

Presentada ante la fiscalía de la CPI el 31 de octubre, la denuncia de RSF detalla los casos de nueve periodistas asesinados en el ejercicio de su trabajo desde el 7 de octubre y otros dos que resultaron heridos, también en el ejercicio de su trabajo. También cita la destrucción deliberada, total o parcial, de las instalaciones de más de 50 medios de comunicación en Gaza. 

Según el recuento de RSF, 34 periodistas han sido asesinados desde la avanzada de Israel, luego del ataque de Hamas contra la ocupación en Palestina, de los cuales al menos 12 fueron asesinados en el curso de su trabajo: diez en Gaza, uno en Israel y uno en el Líbano.

“La escala, la gravedad y la naturaleza recurrente de los crímenes internacionales contra periodistas, particularmente en Gaza, exigen una investigación prioritaria por parte del fiscal de la CPI. Hemos estado pidiendo esto desde 2018. Los trágicos acontecimientos actuales demuestran la extrema urgencia de la necesidad de que la CPI actúe”, afirmó Christophe Deloire, secretario general de RSF.

Esta denuncia de RSF ante la CPI se refiere a ocho periodistas palestinos que fueron asesinados en bombardeos de zonas civiles en Gaza por parte de Israel, y a un periodista israelí que fue asesinado el 7 de octubre mientras cubría un ataque a su kibutz por parte de Hamas.

En su denuncia, RSF también pide al fiscal que investigue todos los casos de periodistas asesinados desde el 7 de octubre: 34, según nuestras últimas informaciones. La denuncia de RSF detalla los casos de periodistas asesinados en el ejercicio de su trabajo. Otros casos aún están siendo investigados antes de ser remitidos a la CPI. Varios periodistas han sido asesinados o heridos en el Líbano, que –a diferencia de Palestina– no es Estado Parte de la CPI. RSF está estudiando la posibilidad de remitir estos casos a otras jurisdicciones competentes.