En una declaración sobre el terremoto, el presidente del Consejo Supremo de Radio y Televisión (RTÜK) Ebubekir Şahin se ha dirigido a los y las periodistas en Turquía con las siguientes palabras: "No es posible que ignoremos las emisiones manipuladoras". La policía, por su parte, ha anunciado que ha abierto diligencias contra 63 personas por compartir información sobre la catástrofe.

El RTÜK y la Dirección General de Seguridad han hecho una declaración conjunta sobre el terremoto, con epicentro en Pazarcik, que ha causado la muerte de miles de personas. En ella, Şahin ha dicho: "Es una obligación legal de las emisoras no compartir información que perjudique las actividades de búsqueda y rescate llevadas a cabo en la zona del terremoto, que asuste a la gente o difundir desinformación".

A lo que ha agregado: " No es posible que ignoremos las emisiones manipuladoras con mala intención", haciendo referencia a la información más crítica contra el gobierno.

La Dirección General de Seguridad, por su parte, ha hecho público que han emprendido medidas contra 63 personas en relación con mensajes considerados “una provocación”.

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