Pakshan Azizi, trabajadora social, activista por los derechos de la mujer y figura destacada en la lucha contra la discriminación étnica y de género, nació en Mahabad.
Durante años abogó por las víctimas de la violencia doméstica y trabajó en la capacitación de las mujeres. Pakshan Azizi organizó programas de sensibilización para mujeres en las regiones kurdas, educándolas sobre sus derechos.
También participó en iniciativas culturales y sociales para promover la igualdad de género y los derechos de la infancia. Como miembro clave de organizaciones locales, trabajó incansablemente para amplificar las voces de las mujeres y las minorías marginadas.
Detención y cargos
En agosto de 2023, Pakshan Azizi fue detenida en su domicilio por las fuerzas de seguridad. Inicialmente la acusaron de delitos como 'rebelión contra el régimen' (Baghi) y 'propaganda contra el Estado'. Tras un juicio opaco, el Tribunal Revolucionario de Teherán, presidido por el juez Iman Afshari, la condenó a muerte.
Los informes indican que Azizi sufrió graves torturas físicas y psicológicas durante su detención en las instalaciones del Ministerio de Inteligencia para extraerle confesiones falsas por delitos que no había cometido.
Condiciones de reclusión
Pakshan Azizi está recluida actualmente en el pabellón político de mujeres de la prisión de Evin en condiciones terribles:
Se le niega representación legal: A su abogado sólo se le permitió acceder a su caso una vez concluida la fase de interrogatorio.
- Falta de atención médica: Azizi sufre problemas físicos debidos a la tortura, pero se le niega tratamiento médico adecuado.
- Contacto restringido con la familia: Tiene acceso limitado a llamadas telefónicas y se la priva de visitas familiares periódicas.
Reacciones e importancia del caso
La condena a muerte de Pakshan Azizi ha desatado protestas generalizadas dentro y fuera de Irán. Numerosas organizaciones de derechos humanos, entre ellas Amnistía Internacional y Human Rights Watch, han condenado la sentencia y han pedido su revocación inmediata.
Sus compañeros de la prisión de Evin han organizado varias sentadas y huelgas de hambre para mostrar su solidaridad y protestar por la sentencia.
El caso de Pakshan Azizi se ha convertido en un símbolo de la opresión sistémica de las mujeres kurdas y del uso de la pena de muerte como herramienta para intimidar a los disidentes. Este caso refleja las políticas estatales dirigidas contra los derechos de las mujeres y las minorías étnicas, que pretenden silenciar sus voces.
A pesar de la represión, Azizi y otras como ella han inspirado movimientos de resistencia que defienden los derechos y la libertad de las mujeres tanto en Irán como en el resto del mundo.
Exigencias y expectativas
Activistas de derechos humanos, defensores de las mujeres y defensores de los derechos de las minorías han subrayado en diversas declaraciones la urgente necesidad de una acción internacional para impedir su ejecución. Estas demandas incluyen:
- Presión diplomática sobre el gobierno iraní para que revoque las condenas a muerte.
- Apoyo a los movimientos de mujeres y minorías étnicas en Irán.
- Campañas internacionales para abolir la pena de muerte y liberar a los presos políticos.
Conclusión
Pakshan Azizi es un símbolo de la lucha de las mujeres kurdas por la justicia, la libertad y la igualdad. Su caso pone de manifiesto flagrantes violaciones de derechos humanos y el uso de la violencia por parte del Estado para reprimir la disidencia.
El movimiento 'Mujeres, Vida, Libertad', surgido de las protestas de Irán, representa la determinación de las mujeres y los hombres iraníes para acabar con la opresión y el régimen autoritario.
Junto con otras valientes mujeres encarceladas, Pakshan Azizi sigue inspirando a la sociedad y nos recuerda la urgente necesidad de solidaridad mundial para alcanzar la justicia y la libertad.
Noticias Relacionadas: