El líder del pueblo kurdo Abdullah Öcalan lleva en la isla prisión turca de Imrali desde 1999 y está completamente aislado del mundo exterior. Desde marzo de 2021, no ha habido señales de vida de él ni de sus tres compañeros de prisión, Ömer Hayri Konar, Hamili Yıldırım y Veysi Aktaş. La prohibición de visitas se aplica a los abogados y familiares cercanos de los cuatro presos y también excluye la comunicación escrita o telefónica.

En respuesta a una pregunta del grupo parlamentario DEM a la comisión parlamentaria de Derechos Humanos, el departamento del Ministerio de Justicia turco responsable de prisiones respondió que los presos de la cárcel de alta seguridad de Imrali pueden hacer uso de todos los derechos legales y que, por tanto, el término "aislamiento" no es aplicable. Como se supo a principios de semana, dos días antes de esta respuesta, se impuso a los cuatro presos una prohibición de visitas de tres meses como "castigo disciplinario".

Ante este hecho, el abogado Ibrahim Bilmez, del bufete Asrin de Estambul, ha declarado a ANF que el Ministerio de Justicia "miente oficialmente". El equipo jurídico pudo visitar a Abdullah Öcalan por última vez en agosto de 2019. Ömer Hayri Konar, Hamili Yıldırım y Veysi Aktaş nunca han podido hablar con su representación legal desde su traslado a Imrali en 2015. La prohibición de las visitas de los abogados a Imrali viola flagrantemente las Reglas Mínimas de las Naciones Unidas (ONU) para el Tratamiento de los Reclusos (Reglas Nelson Mandela), actualizadas en 2015, las recomendaciones del Comité contra la Tortura del Consejo de Europa (CPT) y la Ley de Ejecución turca nº 5275."

Método Goebbels: contar una mentira mil veces

Para Bilmez, la afirmación del Ministerio de Justicia turco de que no hay aislamiento sobre Imrali es "casi un insulto al público". La Dirección General de Prisiones y Centros de Detención del Ministerio de Justicia miente oficialmente", afirmó el abogado. Esta práctica está directamente relacionada con la forma en que el AKP ha gobernado el país durante veinte años: "Si dices una mentira mil veces, la sociedad empieza a creer lo que dices. Realmente están utilizando este método Goebbels y, por desgracia, se están creyendo la mentira. Nosotros respondemos a estas mentiras y siempre hemos hecho declaraciones al respecto. Si el Ministerio de Justicia afirma que no hay aislamiento en Imrali, entonces debería explicar con qué frecuencia se reunían los abogados con sus clientes".

Sin noticias de Imrali

Veysi Aktaş, uno de los cuatro presos, debería haber sido liberado a finales de abril. Su equipo jurídico ni siquiera fue informado de que su pena de prisión se había prorrogado un año. Explicando que Aktaş, que fue condenado a cadena perpetua, debería haber sido puesto en libertad condicional de acuerdo con la ley después de cumplir 30 años, Bilmez dijo: "No fue puesto en libertad, el plazo de ejecución se prorrogó un año más por decisión del Comité de Gestión y Supervisión de Prisiones. Sólo nos enteramos de esta situación en una llamada telefónica con la administración de la prisión. Obviamente, la decisión de prorrogar su detención es una continuación de la política de bloqueo de noticias sobre Imrali. Es un intento de impedir cualquier noticia sobre el Sr. Öcalan. Esta situación va más allá del aislamiento y el gobierno quiere mantenerla".

Ilegal e irrespetuoso

El abogado Ibrahim Bilmez afirmó además que la prohibición de las visitas se justifica y amplía con "castigos disciplinarios" impuestos regularmente. Este método oculta sistemáticamente el aislamiento y no tiene ninguna explicación legal, dijo el abogado, añadiendo: "Ninguna de estas decisiones es legal. Pero afirmar que no hay aislamiento en Imrali a pesar de la prohibición de visitas es un insulto, tanto para nosotros los abogados como para el público, y es una falta de respeto."

Los mensajes de Öcalan deben suprimirse

El último contacto con Abdullah Öcalan fue una conversación telefónica el 25 de marzo de 2021, que se logró gracias a las protestas. Sin embargo, la llamada se interrumpió a los pocos minutos por motivos desconocidos.

Bilmez recordó que Öcalan solicitó el contacto con sus defensores durante la última llamada telefónica con su hermano. "Es evidente que quieren impedir que la voz de nuestro cliente Öcalan llegue al mundo exterior. Esto es así desde hace mucho tiempo; es como si la cuestión kurda no existiera. Quieren resolver la cuestión kurda con una política de violencia, y por eso aíslan al Sr. Öcalan. Esto está muy claro: no quieren oír nada de Imrali porque sería una voz a favor de una solución. Y el gobierno no quiere eso".

Sin solución a la cuestión kurda no puede haber democratización

Para Bilmez, las flagrantes mentiras del gobierno indican la gravedad de la situación. El abogado exigió que se tomen medidas decisivas contra el aislamiento y las mentiras basadas en él. No sólo un determinado grupo de personas, sino toda la oposición debe adoptar una postura. La pasividad se convierte en pasto para el molino del Estado y, de este modo, se legitima el aislamiento. Bilmez subrayó que la distensión de la situación política sólo sería posible con una solución de la cuestión kurda y, por tanto, con el fin del aislamiento de Imrali. Dijo: "Si ha de haber diálogo en Turquía y si el gobierno ha de encaminarse hacia la democracia, la política sobre Imrali será el papel de tornasol".

El abogado Bilmez dijo: "Quien siga pensando hoy que el aislamiento o la cuestión kurda no resuelta no le concierne, debería haberlo pensado mejor hace mucho tiempo. Porque es una cuestión que afecta a todos. Si realmente va a haber un cambio en este país, si va a haber un proceso de diálogo con el gobierno, entonces la cuestión kurda y el aislamiento también deberían estar en la agenda. Se lo digo especialmente a la principal oposición. Debe abordar el aislamiento y no hacer la vista gorda ante él. No debería fingir que el aislamiento no existe. De lo contrario, no será una mejora real, sino sólo un ablandamiento económico de la situación".