Acción solidaria en Berlín critica al gobierno alemán por apoyar al régimen de Erdoğan

Una acción solidaria por los presos políticos de Turquía en Berlín critica a Alemania por su apoyo al régimen de Erdogan.

La campaña de solidaridad con los presos políticos de Turquía, que se ha desarrollado durante dos semanas en la plaza Alexanderplatz de Berlín, ha concluido con una concentración este viernes. La campaña "Es Hora de Libertad" continuará de forma descentralizada, dijo Tahir Koçer, copresidente de la organización nacional KON-MED en un discurso en Alexanderplatz.

En el último día de la acción solidaria, en la que participaron representantes de numerosas organizaciones, volvieron a sonar los reproches al Gobierno Federal por su apoyo al régimen de injusticia en Turquía. El líder del Partido de la Izquierda de Hamburgo, Cansu Özdemir, declaró en un discurso: "Nadie hace una huelga de hambre por diversión. La gente tiene reivindicaciones serias y trata de ponerlas de manifiesto con una huelga de hambre. En primer lugar, se trata de la situación en las cárceles. Miles de figuras de la oposición están injustamente encarceladas en Turquía, entre ellas alcaldes, diputados, abogados y periodistas. Todas estas personas son víctimas del régimen del AKP, un régimen dictatorial que sigue siendo alimentado y apoyado con armas por la República Federal de Alemania".

Mehtap Erol, copresidente de la asociación kurda FED-KURD, también criticó al gobierno federal por su tolerancia con las acciones ilegales del gobierno del AKP. La ex diputada del HDP Sibel Yiğitalp describió la huelga de hambre en las cárceles turcas, que se lleva a cabo desde el 27 de noviembre, como un "levantamiento contra otro genocidio en Shengal, contra la ocupación de Rojava, contra la campaña de exterminio contra el pueblo kurdo y contra el aislamiento de Abdullah Öcalan". El político kurdo, que vive en el exilio debido a la persecución política, declaró que quien se considere democrático o simplemente humano debe apoyar este levantamiento.

También intervinieron las organizaciones de mujeres YJK-E, SKB y Women Defend Rojava, así como el Consejo Popular de Tamil Eelam.