El historiador Dr. Nick Brauns afirmó que la guerra hegemónica entre Rusia y los estados occidentales ha llevado al colapso de la Modernidad Capitalista y que es posible salir de esta guerra a través del paradigma de la Modernidad Democrática del líder kurdo Abdullah Öcalan.
El historiador y periodista habló con ANF sobre la guerra hegemónica entre Rusia y los estados occidentales. Así, afirmó que se debe conocer bien la historia para entender esta guerra. Indicó que tras el colapso de la Unión Soviética, la OTAN dirigida por Estados Unidos intentó expandirse a Rusia.
“Rusia prometió reunir a Alemania y, a cambio, pidió a la OTAN que no se ampliara, pero en los últimos 30 años vimos que Alemania Oriental se unió a la República Federal y, por lo tanto, se convirtió en miembro de la organización internacional. Posteriormente, la OTAN se expandió gradualmente hacia las fronteras de Rusia y más y más países se unieron a ella. La debilidad de Rusia fue explotada por los países occidentales", detalló.
Ucrania se convierte en el puente de la OTAN
El Dr. Brauns comentó que hace siete años hubo un levantamiento popular contra la corrupción y el sistema autocrático en Ucrania. “Fue un levantamiento que fue manipulado muy rápidamente por Estados Unidos con la ayuda de la CIA. Las fuerzas neofascistas jugaron un papel importante durante el levantamiento y, desde entonces, Ucrania ha sido fortalecida sistemáticamente por miembros no pertenecientes a la OTAN. Ucrania se ha convertido en una especie de puente de la OTAN contra Rusia, a la que el presidente ruso considera una gran amenaza, por los misiles en Ucrania o los países bálticos, que pertenecen a la OTAN. Estos pueden llegar a Petersburgo o Moscú en cuestión de minutos, y es por eso que el presidente ruso Putin ha exigido repetidamente en las últimas semanas y meses que se introduzca un acuerdo diplomático que bloquee a Ucrania”, explicó.
Pueblo ucraniano, víctimas de la guerra hegemónica
El Dr. Brauns citó al presidente de Ucrania, Zelensky, en la Conferencia de Seguridad de Munich diciendo que “también queremos tener armas nucleares”. Agregó que si la última guerra no hubiera estallado, Ucrania podría producir sus propias armas nucleares con relativa rapidez.
El historiador alemán remarcó que el sistema mundial capitalista es uno que promueve los intereses del capital desafiando los intereses de los pueblos. “Hay bancos, corporaciones, oligarcas y gobiernos que favorecen las ganancias en contra de los intereses de la gente”, advirtió Brauns. El pueblo ucraniano podía hablar tanto ruso como ucraniano, pero el ruso fue repentinamente prohibido y solo "el ucraniano debe hablarse y aprenderse", señaló el historiador alemán, y agregó que el pueblo ucraniano es víctima de una guerra hegemónica.
Las ideas de Öcalan se pueden aplicar a Ucrania
Para el Dr. Brauns, el paradigma y las ideas del líder kurdo Abdullah Öcalan brindan a los pueblos, lenguas y culturas diferentes la oportunidad de convivir como alternativa al sistema capitalista. “La idea de Modernidad Democrática de Öcalan es un sistema que también se puede aplicar a los pueblos de Ucrania. Si logramos expulsar a los imperialistas, podemos poner en práctica las viejas experiencias de Öcalan y las nuevas ideas. Podemos frustrar la herramienta de 'divide y vencerás' de los imperialistas que enfrenta las diversidades culturales, étnicas, religiosas y lingüísticas de los pueblos entre sí”, propuso.
El Dr. Brauns recordó que las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk habían sido proyectos democráticos radicales hasta que las bandas mafiosas llegaron al poder. “La idea de las Repúblicas Democráticas era la idea del autogobierno. ¿Quién sufrirá más con esta guerra? ¿Quién escapa en primer lugar? Las mujeres están huyendo ahora… Creo que la idea del Confederalismo Democrático que surgió en Rojava ofrecerá mucho a las mujeres en Ucrania y Rusia. Hubo muchas buenas experiencias que vivir, pero al final vimos que este sistema socialista no estaba funcionando, y aquí es donde entran en juego las ideas de Öcalan. La igualdad de género y los derechos de las mujeres están garantizados en este modelo de sociedad que se organiza democráticamente, ya que los ciudadanos no esperan todo del Estado”.
La OTAN y Turquía hacen lo mismo en Siria
“Ahora tenemos que decirles a aquellos que se oponen a la invasión rusa de Ucrania, la OTAN y Turquía están haciendo lo mismo en Siria, y Turquía no puede atacar ni a Rojava ni al sur de Kurdistán sin el apoyo de Estados Unidos. Las tropas estacionadas en Rojava dan luz verde a Turquía para estos ataques. Los ataques aéreos contra los campamentos de refugiados de Shengal y Makhmur no pueden llevarse a cabo sin el permiso de los EE. UU., que controla el espacio aéreo sobre Kurdistán del Sur”.
El historiador alemán señaló que, a diferencia de la guerra de Rusia contra Ucrania, no es posible ver los ataques de Turquía en el norte de Siria en los principales medios de comunicación. “Porque Turquía es un socio de la OTAN cercano a Alemania y Estados Unidos. Esta es una política imperialista. Ningún lado es mejor que el otro. Vemos que, para los políticos y la prensa occidentales, algunos seres humanos son más dignos de vivir que otros. Tratan a los niños kurdos y a los niños ucranianos rubios de manera diferente”, denunció.
Debemos luchar por la modernidad democrática
El Dr. Brauns también habló sobre el presupuesto de 100 mil millones de euros de Alemania para armamento y el comentario de los funcionarios del gobierno alemán: "Ahora tenemos que comprar muchos tanques y armas para proteger y luchar por nuestra libertad y democracia".
"No voy a permitir que el gobierno me diga que tenemos que ahorrar dinero para financiar nuevos tanques aquí en Alemania. Deberíamos usar menos la calefacción para que Putin no gane dinero con nosotros y, al mismo tiempo, tenemos que trabajar más para financiar el programa de armamento. El socialista Karl Liebknecht (asesinado en 1919 con Rosa Luxemburgo) fue la única persona que votó en contra de la guerra en el Parlamento alemán durante la Primera Guerra Mundial. El principal enemigo del pueblo alemán no es el pueblo ruso ni el británico sino el imperialismo alemán, el militarismo alemán y el partido de guerra alemán. Los trabajadores alemanes deben eliminarlos", convocó.
"Nuestra tarea es luchar contra los militaristas e imperialistas alemanes en Alemania. El pueblo ruso debe luchar contra Putin y la oligarquía local. Lo importante es que no nos dejemos engañar por la propaganda nacionalista de los líderes relevantes. Debemos luchar contra el capitalismo, el imperialismo y el racismo en todos los países en los que vivimos. Debemos luchar por la libertad de género y la modernidad democrática. Debemos luchar internacionalmente; aquí, en Estados Unidos, en Rusia o en Turquía…”, concluyó.