La administración de Berlín, tras haber recibido insultos por parte del presidente turco Recep Tayyip Erdogan, tales como “estáis haciendo políticas nazis”, “sois el patio trasero de organizaciones terroristas” o “escucharé lo que dice mi pueblo no lo que dice Hans”, ha anunciado oficialmente que están comenzando un nueva fase en las relaciones con el régimen de Ankara.

Policía bueno, policía malo

Erdogan llegó a Berlín el jueves, y fue recibido por el presidente alemán Frank Walter Steinmeier con honores militares. Los dos presidentes se reunieron en privado y no realizaron declaraciones ante la prensa, pero las fotografías, que mostraban a Steinmeier en actitud tensa, fueron publicadas en los medios.

Al contrario que el presidente, la cancillera Angela Merkel recibió a Erdogan con una amplia sonrisa. La imagen, distribuida a los medios, dio pie a la prensa a hablar de “Steinmeier como poli malo y Angela Merkel como poli buena”. Erdogan entró después  en el edificio del Primer Ministro tras la evacuación de los alrededores del edificio y del parlamento federal realizado por la policía.

Mensajes de un nuevo comienzo

Tras la reunión, Merkel y Erdogan realizaron una conferencia de prensa conjunta, pero solo se permitió la entrada a un reducido grupo de periodistas. La acreditación de muchos periodistas fue cancelada a petición de funcionarios turcos. El periodista Can Dündar, que había afirmado que preguntaría a Erdogan sobre la situación de los periodistas en Turquía, emitió un comunicado público poco antes de la conferencia de prensa y anunció que no asistiría a la misma.

Merkel habló primero y dijo que la reunión había sido productiva: “hemos acordado un nuevo comienzo en las relaciones entre nuestros dos países”. Merkel informó que se habían tratado cuestiones importantes y que se reuniría de nuevo con Erdogan el sábado por la mañana en un desayuno, dando a entender que las negociaciones continuarán.

Merkel anuncia una cumbre a cuatro partes

“Nosotros, como Alemania, deseamos una Turquía estable”, apuntó Merkel que evitó criticar al estado turco en todo momento. Anunció la celebración de una cumbre de ambos países junto con Francia y Rusia a mediados de octubre para tratar la situación en Idlib.

“Queremos mejorar nuestra cooperación en la lucha contra el terrorismo. Queremos recuperar la cooperación entre nuestros ministerios del interior. Los ministerios de exteriores ya  tienen una cooperación importante. No solo es cuestión de unos ciudadanos alemanes encarcelados en Turquía, tenemos diferencias de opinión sobre otros asuntos. Pero necesitamos gestionarlos a través del diálogo bilateral. Sin duda, estoy a favor de las conversaciones y las reuniones. Estoy emocionada por la reunión de mañana”, apuntó la canciller.

A la pregunta de un periodista turco sobre la lucha contra el PKK y la extradición de miembros del movimiento de Gulen que han encontrado asilo en Alemania, Merkel manifestó que “el PKK ha sido prohibido en Alemania. Toda su actividad está prohibida en Alemania. No hemos discutido los detalles en el día de hoy. Pero sí en otras reuniones. Hay personas que tienen órdenes de arresto en Alemania. No hemos tenido éxito en algunos casos. No estamos seguros que algunos individuos estén o no en Alemania, pero las investigaciones continúan. Pero en relación a considerar al movimiento de Gulen al mismo nivel que al PKK, todavía no estamos en ese punto, necesitamos más información”.

La intervención de Erdogan ha sido un espectáculo y ha afirmado que en Turquía existe el estado de derecho. Ha añadido que están planeado cumplir los 6 criterios pendientes para obtener la exención de visado para sus ciudadanos: “La exención de visados y la unión aduanera, en proceso de actualización, beneficiará  tanto a Turquía como a Europa. Queremos que este proceso crítico siga adelante sin ser sometido a los caprichos de determinados sectores. Damos mucha importancia al apoyo de Alemania”.

Erdogan admite estar “trabajando con la inteligencia alemana”

Erdogan ha dicho que necesitan más apoyo de Alemania para poder poner en la lista de organizaciones terroristas al movimiento de Gulen así como en la lucha contra el PKK, y ha admitido que el MIT está trabajando con los servicios de inteligencia alemanes.

Erdogan ha dicho que “hay miles de terroristas del PKK en Alemania, cuyos nombres sabemos. Es también un hecho que las personas aquí están mezcladas entre la población. En cuanto a FETO, cientos de miembros de FETO también están aquí, creo que facilitará nuestro trabajo si entregamos a cualquier persona a la que cojamos, en cualquier momento en el que la cojamos, ya sea gracias a los esfuerzos de nuestros servicios de inteligencia o en conjunción con los servicios secretos alemanes, en un clima de confianza mutua”.

Cuando Merkel ha recibido preguntas sobre los ciudadanos alemanes arrestados en Alemania, la canciller ha rechazado dar detalles concretos de la conversación: “No voy a decir uno a uno los asuntos que hemos tratado, pero sí hemos gestionado este asunto de forma concreta. Hay conversaciones largas al respecto. Por ejemplo, la persona que usted cita es uno de los casos que hacen más difícil nuestro trabajo. Hay un total de cinco casos. Puede confiar en que el asuntos ha sido tratado de forma específica”.

Erdogan, pasando por alto el pisoteo del estado de derecho y del sistema judicial que han sido puestos a su servicio, se ha mostrado molesto a la hora de ser preguntado al respecto: “Yo no tengo el derecho de opinar o criticar sobre el sistema legal o los tribunales en Alemania, y vosotros no tenéis el derecho de criticar el sistema legal turco. El sistema judicial es independiente. Las sentencias que emiten han de ser respetadas. Ha habido veces que en mi propio país ha habido sentencias con las que yo no estoy de acuerdo, pero las he de cumplir”.

La cuestión del periodista Dündar también ha formado parte de la conferencia de prensa. Merkel ha reconocido la existencia de un problema: “Es claro que hay un conflicto en relación al periodista Dündar. Él mismo ha decidido no venir a la conferencia de prensa. Quiero dejar claro que no hay un sistema de acreditación dual de ninguna de las maneras”. Erdogan por su parte ha acusado a Dündar de ser un espía y ha exigido su extradición.

Uno de los periodistas que asistían a la conferencia de prensa, Ertugul Yigit, ha sido expulsado a la fuerza por unidades de seguridad alemanas por llevar una camiseta en la que se podía leer: “Gazetecilere Özgürlük” (“Libertad para periodistas”).