La marcha de los colegios de abogados acabó a las afueras de la capital turca durante la tarde de ayer. El abogado y copresidente de la rama local de la Asociación de Abogados Libertarios (Özgürlükçü Hukukçular Derneği, ÖHD), Şevin Kaya, fue tirado al suelo por agentes de policía que procedieron a pegarle a patadas cuando se encontraba en tierra. Durante la protesta más abogados han sido objeto de violencia policial.
La marcha de los abogados es una protesta contra el desmantelamiento del estado de derecho ya había detenida por la policía a la entrada de Ankara durante la mañana de ayer y a los participantes se les negó la entrada. Las fuerzas de seguridad justificaron la medida aduciendo que “era una alteración del orden público” y por tanto no estaba permitida. Debido a ello, los abogados realizaron una sentada que siguió varias horas a pesar de la fuerte lluvia que caía.
Miembros del Colegio de Abogados de Ankara, incluyendo a Şevin Kaya, fueron al lugar para apoyar la sentada, donde los manifestantes fueron detenidos. Las fuerzas de seguridad les negaron el acceso detrás de las barricadas policiales, lo que fue seguido por una carga.
Marcha por un poder judicial independiente
Los presidentes de docenas de colegios de abogados de todo el país iniciaron la marcha a Ankara el viernes pasado desde varias provincias. Están protestando contra un proyecto de ley del régimen Erdoğan que pretende poner a los incómodos colegios de abogados bajo el control del Estado. Los abogados critican que esto restringiría sus derechos. El proyecto de ley cambiará el equilibrio de poder en las asociaciones comprometidas con los derechos civiles y humanos a favor del gobierno. Sin embargo, los abogados no sólo están en contra de la reforma, sino que también exigen un poder judicial independiente.
Erdoğan anunció planes después de las críticas contra el clérigo homófobo
El presidente turco Recep Tayyip Erdoğan había anunciado el inminente cambio de la ley después de que el Colegio de Abogados de Ankara criticara las declaraciones homofóbicas del presidente de la autoridad religiosa estatal Diyanet, Ali Erbaş. En un sermón del viernes al comienzo del Ramadán, el mes de ayuno, a finales de abril, el clérigo calificó el adulterio y la homosexualidad como causas de enfermedad y como algo no islámico. Como ejemplo, se refirió a la propagación del VIH/SIDA y también atribuyó el brote del coronavirus a la homosexualidad y a la convivencia de parejas no casadas. El Colegio de Abogados de Ankara acusó entonces a Erbaş de, entre otras cosas, degradar con odio a una parte de la humanidad y convertirla en un objetivo. Muchos otros colegios de abogados se unieron a las voces que se alzaron contra las declaraciones y la mentalidad de la autoridad religiosa turca.