Bozo Açlan está en la prisión de tipo T de Akhisar. Llamó a su sobrina Meral Açlan hace un mes y le dijo que se impuso un registro exhaustivo de los presos para enviarlos al hospital. Dijo que la situación de los presos empeora cada día que pasa.

Mehmet Sevinç, un preso de 28 años, que sufrió una hemorragia cerebral en la misma prisión el 3 de abril de 2022, murió en el hospital 4 días después. Aunque hubo declaraciones contradictorias por parte de la administración de la prisión y del hospital sobre su muerte, no quedó claro qué causó que el preso Sevinç sufriera una hemorragia cerebral.

No hay hospital para los que se niegan a ser registrados

Meral Açlan describió la conversación que mantuvo con su tío y dijo: "A los presos que no aceptan el cacheo se les niega el tratamiento. Los presos enfermos empeoran cada vez más porque no reciben el tratamiento necesario. Los presos, que no fueron llevados al hospital porque se negaron a abrir la boca durante los cacheos, padecen enfermedades cardíacas, osteoporosis al límite, epilepsia, Parkinson, diabetes, hipertensión, vértigo, enfermedades estomacales e intestinales y llevan cerca de un mes sin recibir tratamiento. Mi tío no está enfermo, pero quería que se escucharan las voces de sus amigos y que se les diera tratamiento lo antes posible".

Açlan dijo que Mehmet Sevinç falleció en la misma prisión hace poco tiempo. Afirmando que todavía hay preguntas sin respuesta sobre la muerte de Sevinç, Açlan dijo: "Lo llevaron al hospital el día anterior. Hubo contradicciones en las declaraciones dadas el día después de su muerte. Es necesario que se apliquen tratamientos para que no se repita la misma situación. Las enfermedades mencionadas son graves y peligrosas si no se tratan. Los presos tampoco pueden tomar sus medicamentos. Sólo se les lleva a la enfermería dentro de la prisión. Allí tampoco se hace un mantenimiento adecuado porque las posibilidades son muy limitadas. Hay que llevarlos al hospital para que reciban una atención adecuada".