El kurdo Yahya Karabaş, de la provincia de Batman, torturado por la gendarmería paramilitar mientras estaba bajo custodia policial, ha sido puesto en libertad tras ser detenido el domingo.

El juez de la Sala de lo Penal del Tribunal de Distrito de Batman no vio motivos para acceder a la petición del fiscal de enviarlo a prisión preventiva por supuesta pertenencia al PKK. Sin embargo, se impuso los requisito de presentarse para firmar semanalmente ordenado anteriormente, y se dictó una prohibición de salida del país. El hombre, por tanto, tiene ahora que presentarse regularmente ante las autoridades policiales.

Yahya Karabaş es una de las 15 personas detenidas violentamente por la policía militar el 31 de marzo durante una redada en su pueblo de Timoq (Gömüşörgü en turco) en Kozluk. Mientras que diez personas del grupo fueron puestas en libertad el mismo día tras ser interrogadas en la comisaría local de Jandarma, Yahya Karabaş y otros cuatro hombres -Yakup Karabaş, Şaban Cengiz, Fırat Baran y Sadullah Karabaş- permanecieron detenidos hasta el 3 de abril. Durante este tiempo, fueron gravemente acosados, según el Colegio de Abogados de Batman.

Se dice que Yahya y Sadullah Karabaş fueron incluso torturados con bolsas en la cabeza.

La acusación contra los aldeanos es "pertenencia a una organización terrorista", es decir, al PKK. Tras el interrogatorio del fiscal el pasado domingo, el tribunal de guardia de Batman emitió una orden de detención contra Sadullah Karabaş. Los otros cuatro miembros del grupo fueron puestos en libertad en contra de los requisitos de registro de la policía.

La nueva detención de Yahya Karabaş se justificó por las "nuevas pruebas" aportadas en el marco de la investigación. Todavía no se ha levantado la prohibición de acceso a la ciudad de Timoq dictada por la oficina del gobernador de Batman el pasado martes.