Se ha llevado a cabo la audiencia por el caso de la Dr. Yonca Demir, acusada de difundir “propaganda terrorista” por la firma de la petición “No seremos parte de este crimen”, en el Tribunal de lo Penal n.º 28 de Estambul.

El Tribunal ha sentenciado a Demir a 3 años de cárcel y ha rechazado posponer la ejecución de la sentencia.

Demir recurrirá al Tribunal de Apelaciones.

Antecedentes

Más de dos mil académicos alrededor de toda Turquía firmaron una petición titulada “No seremos parte de este crimen” en enero de 2016, llamando a una solución pacífica ante el conflicto militar entre el Estado de Turquía y la Lucha por la Liberación Kurda del PKK (Partido de Trabajadores del Kurdistán). En la petición, los firmantes condenaban la violencia estatal contra los kurdos y las constantes violaciones del Estado de Turquía de sus propias leyes y tratados internacionales.

Los académicos se enfrentaron entonces a presiones y acciones legales de todo tipo instruidas por el presidente turco Recep Tayyip Erdoğan, quien les llamó “traidores” y “autodenominados intelectuales”. Decenas de los que firaron la declaración de paz fueron cesados de sus funciones o detenidos por la policía antiterrorista, mientras sus despachos eran allanados por la policía en una búsqueda detallada de “evidencias de vínculos terroristas”.

Incluso se acusó a tres académicos de recibir instrucciones de la KCK (Unión de Comunidades del Kurdistán) a través de un artículo publicado en ANF el 22 de diciembre de 2015, en el que el co-presidente del Consejo Ejecutivo de la KCK, Bese Hozat, hacía un llamamiento a los círculos intelectuales y democráticos en Turquía a apoyar la resistencia del pueblo kurdo con el fin de alcanzar la democratización de todo el país. La policía describió la entrevista como una “instrucción”, alegando que la declaración conjunta de paz se publicó el 11 de enero de 2016 en línea con esta noticia.

El Estado de Turquía sigue persiguiendo a los académicos por la paz desde aquella declaración conjunta contra la guerra del gobierno turco contra la población civil de Turquía en la región del Kurdistán.

Como parte de las agresiones del gobierno contra quienes exigen una solución negociada a la llamada cuestión kurda, cada día más firmantes de aquella declaración se enfrentan a detenciones y acciones legales.