Gracelito Micolta fue miembro del consejo comunitario de Alto Guapi.  Fuentes locales dijeron que viajaba en canoa para unirse a una reunión de la ciudad cuando fue interceptado por supuestos grupos paramilitares en la localidad de Cerda.  Micolta fue entonces asesinado por las fuerzas paramilitares.

Su muerte está asociada a la presencia de miembros de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (AGC) y de un grupo de crimen organizado dedicado al narcotráfico, junto con otras organizaciones militares irregulares que operan en la zona.

"Lo que sucede en el Cauca responde a la lógica de un departamento donde históricamente se han producido conflictos territoriales, con sectores privados legales e ilegales como la minería", dijo Indepaz en un informe sobre el tema.

Hasta ahora, el número de líderes sociales asesinados en Colombia ha aumentado en un 53 por ciento, la mayoría de ellos en medio del brote de COVID-19, según informó la Fundación Ideas para la Paz (FIP).