Decenas de lugares de trabajo y vehículos pertenecientes a refugiados sirios fueron quemados y saqueados en los ataques que comenzaron tras la difusión de las acusaciones de que un sirio violó a un niño en la provincia de Kayseri el 30 de junio. Al mismo tiempo, hubo protestas contra la declaración de Erdoğan de que se acercaría a Assad en regiones como Afrin y Girê Spî, ocupadas por el Estado turco y controladas por el ISIS, Al Nusra y mercenarios similares. Los adeptos de Erdoğan quemaron banderas turcas y estallaron enfrentamientos. Los racistas turcos, que vieron en esto una oportunidad, llevaron a cabo ataques similares a los de Kayseri en muchos otros lugares.

Reunión de emergencia del Partido DEM

Dilan Kunt Ayan, diputada del Partido por la Igualdad y la Democracia de los Pueblos (Partido DEM) por Urfa (Riha) y miembro de la Subcomisión de Inmigración e Integración de la Comisión de Investigación de Derechos Humanos de la Gran Asamblea Nacional turca, convocó a la comisión correspondiente para debatir las medidas que deben tomarse para prevenir nuevos ataques y garantizar la seguridad de los refugiados sirios, especialmente su derecho a la vida. Dilan Kunt Ayan pidió una reunión urgente alegando: «Aunque se sabe que más de 3 millones de sirios en el país no volverán a su país ni a otros países, este odio ha sido alimentado y magnificado en la opinión pública por los políticos, especialmente durante los procesos electorales, a través de la política sobre los refugiados. En el punto al que se ha llegado hoy, todos los actores de la toma de decisiones y el Estado, especialmente la Comisión de Investigación de Derechos Humanos de la Gran Asamblea Nacional Turca, tienen la responsabilidad de poner fin a la quema, destrucción y ataques racistas y llamar a la opinión pública a la moderación.»

Estos ataques son el resultado de la aprobación de las políticas de guerra.

En declaraciones a ANF, el co-portavoz de la Comisión de Inmigrantes y Refugiados del Partido DEM, Murad Mıhçı, declaró que el problema tiene sus raíces en las políticas de guerra: «Estos ataques son el resultado de la aprobación de las políticas de guerra. En el Parlamento, todos los diputados, excepto los del entonces HDP, votaron a favor de aceptar esas políticas. En aquel momento, como HDP, explicamos por qué dijimos no: porque no se puede lograr ningún progreso con políticas de guerra. Al final, se produjo una oleada migratoria debido a los ataques imperiales en esa región (Siria). Por otra parte, hoy los puentes entre esos pueblos se han roto debido a las políticas de inmigración de Turquía y a su visión sobre los refugiados.»

Defendemos obstinadamente que el diálogo entre todos los pueblos del mundo sólo puede lograrse mediante políticas pacíficas.

Mıhçı subrayó que seguirán defendiendo la paz aunque determinados grupos les conviertan en objetivo tras cada declaración que hagan: «Como partido, nos reunimos con las instituciones democráticas del país para debatir los ataques racistas y decidir urgentemente qué podemos hacer. Nuestra diputada Dilan Kunt Ayan presentó una propuesta al Parlamento. Estamos intentando crear un entorno de trabajo para tratar de rebajar las tensiones. Hicimos varias declaraciones. En cada declaración que hicimos, en cada discurso que pronunciamos, fuimos el blanco de ciertos grupos. Pero defendemos obstinadamente que el diálogo entre todos los pueblos del mundo sólo puede lograrse mediante políticas pacíficas, y por eso defendemos la paz».

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