Según los informes oficiales iraníes de ayer, la epidemia de coronavirus ha matado a 15 personas e infectado a un total de 95 en la República Islámica, que parece estar ocultando información sobre la epidemia en consonancia con el ejemplo de China, denuncia RSF.

Reporteros Sin Fronteras (RSF) ha publicado una declaración en la que condena la persecución de Irán contra los medios de comunicación y los periodistas que publican información independiente.

La presencia del coronavirus conocido como Covid-19 en Irán se reveló repentinamente cuando los medios progubernamentales informaron el 20 de febrero que dos iraníes habían muerto en la ciudad santa de Qom después de dar positivo en las pruebas del virus, recuerda RSF. Desde entonces, las autoridades insisten en que tienen la situación bajo control, pero se han negado a publicar las cifras exactas de muertes e infecciones y han obstruido a los periodistas que intentan cubrir la noticia.

La declaración de RSF informa que "El periodista independiente Mohammed Mosaed fue citado e interrogado por agentes de los servicios de inteligencia de la Guardia Revolucionaria el 23 de febrero en relación con los mensajes que había publicado en los medios de comunicación social sobre la epidemia. Fue liberado después del interrogatorio pero su teléfono y su ordenador fueron confiscados y sus cuentas de Twitter y Telegrama han sido cerradas".

RSF señala que el representante parlamentario de Qom, Ahmad Amir Abadi Frahani, llamó la atención sobre un ejemplo de la desinformación del gobierno en una declaración a la prensa al día siguiente. "La epidemia comenzó hace tres semanas pero el Ministerio de Salud retrasó su anuncio", afirmó. "En dos semanas, 50 personas han muerto por el virus en Qom." Se dice que la fuente inicial del brote fue una escuela coránica de la ciudad que recibe a estudiantes religiosos musulmanes de China".

El director general del Ministerio de Salud, Iraj Harirchi, negó inmediatamente la afirmación de Frahani y, usando el término empleado dos días antes por el líder supremo Alí Jamenei, condenó una "guerra de propaganda". Al día siguiente, tanto Frahani como Harirchi recibieron la noticia de que estaban infectados con el virus.

En los medios de comunicación social, los periodistas han protestado contra la censura, las mentiras y la incompetencia de los funcionarios. Los usuarios de Internet también han informado de que en varias ciudades iraníes no se puede acceder al mapa en línea creado por el Centro de Ciencia e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins que sigue los casos del coronavirus Covid-19 en todo el mundo en tiempo casi real.

En respuesta a las protestas en línea, el jefe de la fuerza de ciberpolicía del TLC, Vahid Majid, anunció que unas 30 personas han sido detenidas en varias provincias y acusadas de "difundir noticias falsas en internet sobre la propagación del virus".

"Durante el último año, la República Islámica ha estado ocultando información sobre crisis y catástrofes, sobre inundaciones, protestas masivas y el derribo del avión de pasajeros ucraniano", dijo Reza Moini, jefe de la oficina de RSF en Irán. "El respeto del derecho del público a una información noticiosa plena, independiente, diversa y de calidad, consagrado en la Declaración Universal de Derechos Humanos, es la mejor manera de proteger a la población y combatir los rumores. Retener información puede matar".